El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, calificó de “indignante” el fallo del Tribunal Supremo de Florida que permite la entrada en vigor de una de las leyes de aborto más restrictivas del país, al impedir la interrupción del embarazo a partir de la sexta semana.
“Pone en riesgo la salud y la vida de millones de mujeres” y les quita “la libertad de tomar sus propias decisiones”, detalla Biden en un comunicado difundido por la Casa Blanca.
En su opinión esta decisión podría desencadenar una ley aún más extrema, por parte del gobernador de Florida, Ron DeSantis, que impida a las mujeres acceder a atención médica “incluso antes de que muchas de ellas sepan que están embarazadas”.
Esto sucede luego de que la Corte Suprema de Florida determinó, el pasado primero de abril, que el aborto tras las 15 semanas era constitucional. Este fallo permitió que la prohibición a las seis semanas, promulgada el año pasado, entre en vigor el primero de mayo de 2024, con excepciones por violación, incesto y que peligre la vida de la madre.
Sin embargo, la Corte Suprema estatal deja una opción abierta para que en noviembre este tema se lleve a las urnas y pueda haber un cambio en la iniciativa, impulsada por el gobernador Ron de Santis.
“Estas leyes extremas quitan a las mujeres la libertad de tomar sus propias decisiones sobre atención médica y amenazan a los médicos con penas de cárcel”, agregó Biden.
Florida es uno de los estados liderados por republicanos que ha impulsado el debate sobre el aborto en Estados Unidos desde que el Tribunal Supremo estadounidense revocara, en junio de 2022, el fallo de Roe contra Wade, el precedente legal que permitía la interrupción del embarazo desde 1973.