El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se reunirá este miércoles con asesores de inmigración y altos funcionarios del Gabinete mientras envía a funcionarios de la Casa Blanca a un centro de reasentamiento en Texas, a medida que aumenta la presión por un aumento reciente en las llegadas de migrantes a la frontera de la Unión Americana.
Los funcionarios, junto con varios miembros del Congreso, viajarán a un centro de reasentamiento de refugiados en Carrizo Springs, Texas”, señaló la Casa Blanca.
En la Casa Blanca, Biden se reunirá con los jefes del Departamento de Seguridad Nacional y el Departamento de Salud y Servicios Humanos, los cuales tienen la tarea de administrar a los migrantes que han cruzado la frontera sur de Estados Unidos con México.
Los periodistas han estado presionando a la administración de Biden para que permita a los medios de comunicación acceder a las instalaciones, ya que las imágenes publicadas esta semana se han movido para resaltar las condiciones de hacinamiento.
Los funcionarios estadounidenses luchan por albergar y procesar a un número cada vez mayor de niños no acompañados, muchos de los cuales han estado atrapados en estaciones fronterizas similares a cárceles durante días mientras esperan ser colocados en albergues gubernamentales abrumados.
La administración ha recurrido a los centros de convenciones y, este martes, buscó albergar a algunos en bases militares en Texas.
La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, quien se unirá a Biden en la reunión de la Casa Blanca, reconoció el hacinamiento y las demoras en el procesamiento, pero dijo que no había una solución rápida.
Es un gran problema. Esto no se resolverá de la noche a la mañana”, comentó Kamala Harris.
También señaló la necesidad de abordar las causas fundamentales que llevan a los migrantes al norte.