Los bombardeos israelíes en la Franja de Gaza se reanudaron este lunes, tras una semana que dejó más de 200 muertos, la gran mayoría palestinos, mientras Hamás e Israel hacían oídos sordos a los llamamientos internacionales de desescalada.
La fuerza aérea israelí realizó decenas de bombardeos en la Franja de Gaza, donde varios grupos armados dispararon cohetes contra Israel.
La Media Luna Roja catarí afirmó que sus oficinas en la ciudad de Gaza resultaron dañadas por un bombardeo, y el Ministerio de Salud, cuyos locales fueron alcanzados por los misiles, así como una clínica.
El único laboratorio que realiza tests de COVID-19 en la Franja de Gaza dejó de estar operativo después de que la clínica que lo alberga, Al Rimal, fuera alcanzada por un ataque israelí, anunciaron las autoridades.
Los bombardeos israelíes obligaron a “cesar los test de detección en el laboratorio central”, declaró Aschraf al Qodra, portavoz del Ministerio local de Salud.
De su lado, el ejército israelí indicó que atacó nueve viviendas de altos mandos de Hamás, algunas de las cuales eran utilizadas para “almacenar armas”, y un navío “sospechoso de ser un arma naval sumergible”.
La Yihad Islámica, segundo grupo armado palestino en la Franja de Gaza, anunció que Hosam Abu Harbid, uno de sus comandantes, había muerto en un ataque.
Nunca ha habido bombardeos de este calibre”, aseguró Mad Abed Rabbo, de 39 años, que vive en el oeste de la ciudad de Gaza y dice sentir “horror, miedo”.
El Programa Mundial de Alimentos anunció una ayuda de urgencia para más de 51 mil personas en la Franja de Gaza asolada por la pobreza y el desempleo.
Limitar desplazamientos
Desde el 10 de mayo, cuando comenzó la actual espiral de violencia, 200 palestinos perdieron la vida, de ellos 59 niños, y más de mil 300 resultaron heridos.
El domingo, 42 palestinos, entre ellos al menos ocho niños y dos médicos, murieron en los bombardeos israelíes en Gaza, el mayor número de muertos en un día, según el Ministerio de Salud local.
Por el lado israelí, 10 personas murieron, entre ellas un niño, y 294 resultaron heridas por la explosión de los cohetes lanzados desde Gaza.
Los israelíes, especialmente los del sur del país que viven con continuas alertas de cohetes, fueron llamados por el primer ministro Benjamin Netanyahu a “limitar sus actividades al aire libre”.
Los grupos armados palestinos, entre ellos Hamás y la Yihad Islámica, dispararon más de 3.150 proyectiles contra Israel desde el inicio de las hostilidades.
Se trata del mayor ritmo de lanzamiento registrado contra territorio israelí, precisó el ejército, según el cual gran parte fueron interceptados por su escudo antimisiles Cúpula de Hierro.
El ejército israelí, que asegura que el objetivo de sus bombardeos son los locales y equipos de Hamás así como algunos comandantes y túneles subterráneos, acusa al movimiento islamista de usar a los civiles como “escudos”.
En otro frente, el ejército israelí afirma haber efectuado tiros de artillería en dirección al sur de Líbano después del lanzamiento, sin éxito, de seis cohetes hacia el norte de Israel.