En autobuses, Guatemala transporta de regreso a Honduras este martes 19 de enero a varios grupos de migrantes que formaban parte de una caravana y que marchaban a pie rumbo a Estados Unidos, luego de ser reprimidos por policías y militares, que los obligaron a desistir de la travesía.
Según la portavoz del Instituto Guatemalteco de Migración, Alejandra Mena, se avanzó en el proceso de retorno voluntario hacia el paso fronterizo de El Florido, por donde gran parte de la masa ingresó al país el viearnes.
Según cifras de la institución, unas 3 mil 500 personas ya habían sido regresadas a Honduras, de ellas medio millar de menores de edad.
En la carretera que va hacia El Florido, por donde pasaron a empujones los migrantes la semana pasada, un camión del ejército y una autopatrulla de la policía apoyan en el regreso.
México, que había blindado su frontera con la Guardia Nacional, también envió transportes para el retorno de los migrantes.
Este lunes, un contingente policial y militar enfrentó por la fuerza a unas 4 mil personas que iban al frente de la caravana, entre ellas varios niños pequeños, en una carretera del poblado de Vado Hondo, departamento de Chiquimula, fronterizo con Honduras.
Los migrantes, que estaban apostados en la vía desde el fin de semana, huyeron dispersándose en este área a unos 50 kilómetros de la frontera, tras la acción de la fuerza pública que usó equipo de choque y gas lacrimógeno.
La acción dejó migrantes y uniformados heridos al desatarse un enfrentamiento donde algunos caminantes lanzaron piedras.
Según estimaciones de Guatemala, unas 9 mil personas irrumpieron desordenadamente en la frontera desde el viernes pasado.
Las fuerzas de seguridad actuaron contra la caravana tras agotar un diálogo con los migrantes, a los que se les pidió despejar el camino para permitir el avance del transporte de carga, cuya mercancía corría el riesgo de estropearse.
Por el contrario, un grupo se apoderó momentáneamente de tres camiones e intentó abrirse paso a marcha lenta, lo que desencadenó la acción policial.
Además, al menos 21 personas de la caravana dieron positivo por Covid-19, según el Ministerio de Salud.
Los migrantes hondureños sostienen que escapan de la violencia, la pobreza, y el desempleo, responsabilizando de la situación al presidente Juan Orlando Hernández.