La central nuclear ucraniana de Zaporiyia, ocupada por las fuerzas rusas y recientemente objeto de bombardeos, fue reconectada a la red eléctrica este viernes 26 de agosto. Un día después de su desconexión completa, anunció el operador ucraniano.
“Uno de los reactores de la central de Zaporiyia interrumpidos la víspera fue reconectado a la red eléctrica hoy”, anunció el operador, Energoatom y aseguró que los sistemas de seguridad funcionaban con normalidad.
El reactor, agregó Energoatom, reconectado produce electricidad para las necesidades de Ucrania, por lo que se está llevando a cabo el aumento de su potencia. Ante de ello, Ucrania anunció que la central, situada en el sur del país, había sido totalmente desconectada de la red eléctrica, por primera vez en su historia, debido a que las líneas eléctricas habían sido dañadas.
Zaporiyia ha sido objeto de preocupación desde que cayera en manos de las fuerzas rusas a inicios de marzo, pocos días después de haber invadido Ucrania, el 24 de febrero.
Las autoridades ucranianas creen que Moscú se propone desviar la energía de la central, la mayor de Europa, hacia la península de Crimea, por lo que Estados Unidos condenó este jueves cualquier tentativa de ese tipo.
“La electricidad que Zaporiyia produce pertenece legítimamente a Ucrania y cualquier intento de desconectar la planta de la red eléctrica ucraniana para dirigirla hacia zonas ocupadas [por Rusia] es inaceptable”, afirmó el portavoz del Departamento de Estado, Vedant Patel.
En las últimas semanas, Moscú y Kiev se acusaron mutuamente de bombardear el lugar, que cuenta con seis reactores de una capacidad total de 6 mil megavatios.
Más bombas
Desde la retirada de las fuerzas rusas en los alrededores de Kiev a finales de marzo, la mayoría de los combates se centran en el este, donde Moscú ha ido ganando terreno, y en el sur, donde las tropas ucranianas aseguran que lanzaron varias contraofensivas.
Rusia también bombardea otras regiones con misiles de largo alcance, aunque Kiev y las zonas próximas a la capital no suelen ser alcanzadas.
La red Coalición contra las Municiones en Racimo (CMC) denunció este jueves en su informe anual que Moscú utilizó de forma masiva bombas de racimo en Ucrania, causando cientos de víctimas civiles y dañando viviendas, escuelas y hospitales.
Por su parte, la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, exhortó a Putin a que cese “el ataque armado contra Ucrania” y pidió la desmilitarización de la central de Zaporiyia.
“Llamo al presidente ruso a poner fin al ataque armado contra Ucrania. La central de Zaporiyia debe ser desmilitarizada de inmediato”, declaró.
Asimismo, detalló que sus servicios han contabilizado al menos 5 mil 587 civiles muertos y 7 mil 890 heridos desde el inicio de la invasión rusa de Ucrania hace seis meses. Entre todas esas víctimas cerca de mil eran niños.