A dos años del primer muerto por coronavirus en Wuhan, China aplica medidas draconianas de tolerancia cero y pidió no salir de sus casas a los 14 millones de habitantes de la ciudad de Tianjin, en el norte del país, mientras se efectuaban test anticovid masivos tras detectar varios casos, algunos de ellos de la variante Ómicron.
El gobierno aconsejó a los residentes que no salgan de la ciudad por razones innecesarias. Hasta ahora no se ha dado una orden de cuarentena total.
Se ha pedido a las personas que viajan a Tianjin desde Pekín que se mantengan alejadas, informó la agencia Xinhua.
Los residentes sólo obtendrán el código sanitario verde necesario para viajar cuando reciban un resultado negativo.
Tianjin, una gran ciudad portuaria a unos 120 kilómetros al sureste de Pekín, se ha convertido en una nueva zona de preocupación para las autoridades sanitarias después de detectarse más de 20 casos de Covid-19 en estos últimos días, a menos de un mes de los Juegos de Invierno en la capital china.
Al menos hay dos casos de la variante Ómicron, y 15 infecciones en escuelas, según varios medios estatales.
Tianjin lanzó una campaña de test masivos ayer e instó a los residentes a quedarse en casa o cerca de su vivienda para facilitar las pruebas de detección.
Las autoridades chinas ya tuvieron que hacer frente a un brote más importante en la ciudad de Xi’an, en el noroeste.
Las medidas draconianas de tolerancia cero que aplica el gigante asiático contra el coronavirus, entre ellas confinamientos estrictos y test masivos inmediatos, han suscitado críticas.
Según cifras oficiales, desde el inicio de la pandemia China sólo ha registrado 100 mil casos, de los que fallecieron 4 mil 636.
En tanto, miles de personas se manifestaron en Bruselas y en Praga para expresar su rechazo a las nuevas restricciones impuestas por las autoridades para atajar los contagios de coronavirus.
En Bruselas, unas 5 mil personas marcharon por el centro de la ciudad, según el balance de la Policía, citado por la agencia de noticias Belga.
En concreto rechazaron la vacunación obligatoria del personal sanitario y el uso del certificado digital que demuestra la vacunación o un negativo, convocados por la organización Juntos por la Libertad.