Taiwán acusó este sábado a Pekín de acentuar la presión y querer menoscabar la paz en la región, tras la incursión récord de 38 aviones militares chinos en la zona de defensa de la isla.
La demostración de fuerza de Pekín comenzó el viernes, aniversario del Día Nacional de China, con la incursión de un número récord de aviones militares chinos, 38 en total, entre ellos un bombardero H-6 con capacidad nuclear.
Según el ministerio del Interior taiwanés, el sábado se produjo otro récord con la incursión de 39 aviones en la zona de Taiwán.
Los 23 millones de habitantes de esta isla, gobernada hoy por un régimen democrático, viven bajo la amenaza constante de una invasión de China.
Pekín considera que la isla, regida por un régimen democrático, pertenece a su territorio y amenaza con conquistarla, por la fuerza si fuera necesario.
Desde que en 2012 Xi Jinping se puso al frente del Partido Comunista de China y, por ende, del país, los aviones militares chinos han penetrado muy a menudo en la Zona de Identificación de Defensa Aérea (ADIZ, por sus siglas en inglés) de Taiwán.
Pero la incursión del viernes suscitó una respuesta especialmente virulenta por parte de Taipéi.
China fue beligerante y atacó la paz regional al llevar a cabo numerosos actos de intimidación”, declaró el primer ministro Su Tseng-chang, en una rueda de prensa este sábado por la mañana.
“Es evidente que el mundo, la comunidad internacional, rechazan cada vez más estos comportamientos de China”, señaló.
El Ministerio de Defensa taiwanés indicó que 22 aviones caza, dos bombarderos y un avión antisubmarinos penetraron el viernes en la ADIZ del suroeste de la isla.
Y en la noche del viernes al sábado, un segundo grupo de 13 aviones penetró en esa misma zona, según la misma fuente.
ADIZ no es lo mismo que el espacio aéreo de Taiwán, sino que incluye un área más extensa que se solapa con parte de la zona de identificación de defensa aérea de China continental e incluso con parte de su territorio.
Estas maniobras ocurrieron después de que el lunes Reino Unido enviara por primera desde 2008 un buque de guerra al estrecho de Taiwán, el mar que separa esta isla de China continental y que Pekín considera como un paso marítimo muy sensible.
El ejército chino acusó al Reino Unido de actuar con “mala intención para sabotear la paz y la estabilidad en el estrecho de Taiwán”.
Estados Unidos y otros países consideran que esa zona pertenece a aguas internacionales y que, por lo tanto, está abierta a todo el mundo.
El año pasado, 380 militares chinos fueron detectados en la ADIZ y, en lo que va de 2021, ya se han identificado más de 500.
El último récord diario se remontaba al 15 de junio, cuando 28 aeronaves penetraron en la zona de defensa aérea de Taiwán.
Algunos expertos advierten que las relaciones entre China continental y Taiwán no se habían tensado tanto desde mediados de los años 90.
Responsables militares estadounidenses afirmaron temer que China pueda estar contemplando invadir la isla.
Alexander Huang, profesor asociado de la Universidad Tamkang de Taipéi, consideró que la última incursión aérea no busca únicamente enviar un mensaje a Taiwán.
China envía un mensaje político a Estados Unidos y al Reino Unido el día de su fiesta nacional: ‘No hagan tonterías en mi región'”, explicó Huang, teniendo en cuenta que Washington tiene desplegados dos portaviones en esa zona y el Reino Unido, uno.
En los últimos años, buques de guerra canadienses, franceses y australianos han cruzado también el estrecho de Taiwán, y esto también suscitó enardecidas protestas por parte del gobierno chino.