Los incendios forestales en Los Ángeles (LA) no dan tregua, esta vez a primeras horas de este miércoles las llamas se avivaron en las montañas al norte del condado. Por ello, las autoridades pusieron bajo orden de evacuación a más de 50 mil personas, ya que su vida podría correr peligro.
El incendio Hughes en seis horas consumió unos 39 kilómetros cuadrados de árboles y maleza cerca del lago Castaic, una popular zona de recreo a unos 64 kilómetros de los devastadores incendios de Eaton y Palisades, los cuales siguen ardiendo por tercera semana.
Aunque la región estaba bajo una advertencia de bandera roja, los vientos no eran tan rápidos como cuando estallaron esos incendios, lo que permitió que los aviones de extinción de incendios arrojaran decenas de miles de galones de retardante de fuego.
“La situación en la que nos encontramos hoy es muy diferente a la situación en la que nos encontrábamos hace 16 días”, dijo el jefe de bomberos de Los Ángeles, Anthony Marrone.
Cabe mencionar que, debido a la pronta respuesta de los bomberos, no se informó de viviendas ni otras estructuras quemadas, pero no descartan el peligro.
“Este incendio tuvo una respuesta sólida hoy y, como pueden ver detrás de nosotros, los socorristas están haciendo un gran trabajo para tratar de contenerlo”, dijo Joe Tyler, director de Cal Fire. “Ciertamente, todavía no estamos fuera de peligro”.