
Más de 300 trabajadores surcoreanos detenidos en la planta de Hyundai en Ellabell, Georgia, serán liberados y enviados a casa, confirmó el gobierno de Corea del Sur.
Kang Hoon-sik, jefe de despacho presidencial, informó que las negociaciones con Estados Unidos concluyeron con éxito y que un avión chárter trasladará a los empleados en cuanto se completen los trámites administrativos.
El ministro de Relaciones Exteriores de Corea del Sur, Cho Hyun, viajará a Estados Unidos este lunes para sostener conversaciones adicionales relacionadas con la liberación.
Redada masiva
El pasado jueves, agentes federales realizaron una redada migratoria en el sitio de fabricación de Hyundai, donde se producen vehículos eléctricos en alianza con LG Energy Solution. Según las autoridades, fueron 475 personas detenidas, en su mayoría surcoreanos.
Los trabajadores fueron trasladados a un centro de detención en Folkston, Georgia, cerca de la frontera con Florida.
Ninguno de los detenidos ha sido acusado de delitos, aunque las autoridades señalaron que algunos habían ingresado sin autorización legal y otros permanecían con visas vencidas o bajo exenciones que no permitían trabajar.
El presidente Lee Jae Myung calificó el caso como una infracción injusta a los derechos de los ciudadanos y a las actividades económicas de las empresas surcoreanas en Estados Unidos. El Ministerio de Exteriores expresó “preocupación y pesar” y envió diplomáticos al sitio de la redada.
El operativo sorprendió a la opinión pública en Corea del Sur, ya que el país es considerado un aliado clave de Estados Unidos. Apenas en julio, Seúl acordó inversiones por 350 mil millones de dólares y la compra de 100 mil millones de dólares en energía estadounidense.