La Corte Suprema de Estados Unidos remitió este lunes a un tribunal inferior el tema de la inmunidad penal que Donald Trump reclama como expresidente de aquel país, retrasando aún más su juicio por, presuntamente, haber intentado alterar los resultados de las elecciones de 2020.
Por seis votos a favor y tres en contra, el tribunal dictaminó que un presidente goza de cierta inmunidad procesal.
El presidente de la Corte Suprema, el conservador John Roberts, señaló que un presidente disfruta de “inmunidad absoluta” frente a un proceso penal por actos oficiales realizados mientras estaba en el cargo.
Sostuvo que “no hay inmunidad para actos no oficiales”, y envió el caso nuevamente a un tribunal inferior para determinar cuál de los cargos que enfrenta el expresidente involucra una conducta oficial.
La jueza Sonia Sotomayor recalcó que “nunca en la historia del país un presidente ha tenido motivos para creer que sería inmune a un proceso penal si utilizaba los atributos de su cargo para violar la ley penal”.
Por este caso, el juicio de Trump debería haber comenzado el 4 de marzo, mucho antes de su revancha electoral con el presidente Joe Biden, pero en febrero, la Corte Suprema aceptó examinar su argumento de que merece inmunidad presidencial, dejando el caso en suspenso.
Trump celebra dictamen
El dictamen de la Corte fue celebrado por el magnate, y calificado como una “gran victoria”.
“Gran victoria para nuestra constitución y democracia. ¡Orgulloso de ser estadounidense!”, escribió Trump en su plataforma Truth Social.
Por su parte, el equipo de campaña de Biden, criticó al republicano al considerar que “piensa que está por encima de la ley y está dispuesto a hacer cualquier cosa para ganar y conservar el poder”.
Donald Trump, quien es blanco de cuatro acusaciones penales, ha hecho lo posible para retrasar los juicios hasta después de las elecciones presidenciales.
Apenas en mayo, un tribunal de Nueva York lo declaró culpable por “falsificación contable agravada” para ocultar los pagos realizados a la exactriz porno, Stormy Daniels, para que guardara silencio sobre una relación extramatrimonial que ella asegura haber mantenido con él en 2006, a fin de que no le perjudicara en los comicios de 2016. La condena por este caso, se conocerá el próximo 11 de julio.
De ganar las elecciones, y una vez que preste juramento en enero de 2025, Donald Trump podría ordenar la detención de los procesos federales abiertos contra él.