La Corte Suprema de Estados Unidos prohibió al estado de Nueva York imponer restricciones en los lugares de culto a causa de la pandemia, porque la Constitución garantiza el libre ejercicio de la religión.
El gobernador del estado, Andrew Cuomo, había estipulado que solamente 10 personas podrían reunirse en los lugares de culto de las llamadas “zonas rojas”, donde el virus circula intensamente.
Con cinco votos a favor, incluido el de la nueva jueza, Amy Coney Barrett, la Corte favoreció dos demandas presentadas por la Diócesis Católica Romana de Brooklyn, así como dos sinagogas.