La situación en Gaza es crítica, con más muertes cada día debido a la agresiva ofensiva militar israelí.
La cifra de gazatíes fallecidos superó los 20 mil, de los cuales 8 mil eran niños, como resultado de los continuos e indiscriminados ataques destinados a destruir a Hamás.
Solo en la última jornada, el ejército israelí atacó más de 300 objetivos en todo el territorio de Gaza, que sufre un nuevo corte de comunicaciones.
“Todos son niños pequeños y niñas, ya están todos hechos pedazos, revueltos… (Llanto)”, declaró Yasser Al-Mukdad, desplazado.
La crisis humanitaria se agrava, con escasez de agua, alimentos, medicamentos y espacio. La Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos alerta sobre la crítica situación humanitaria.
“¿A dónde puedo ir? No hay lugar. No hay escuela, ni mezquita, ni clínica, ni hospital, todo está destruido, todo está destruido. Ya basta, ya basta de esto, lo hemos perdido todo y no podemos soportarlo más”, dijo Samar Abu Luli, habitante de Rafáh.
En medio de la escalada, el gobierno israelí pidió detener el financiamiento a ese organismo de la ONU, asegurando que Hamás utiliza sus instalaciones.
En Egipto, Israel y Hamás buscan pactar una nueva tregua para liberar rehenes y presos políticos.
El líder de Hamás, Ismail Haniyeh, participa en las negociaciones, aunque el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, advierte que no habrá un cese total del fuego.
“No pararemos los combates hasta que se alcancen todos los objetivos que nos hemos fijado: la eliminación de Hamás, la liberación de nuestros rehenes y la eliminación de la amenaza de Gaza”, informó Benjamin Netanyahu, primer Ministro de Israel.
En un gesto, el Ministerio de Exteriores israelí anunció la próxima apertura de un corredor humanitario marítimo desde Chipre hacia la Franja de Gaza para mantener un flujo constante de asistencia a los civiles.
“El objetivo es que la asistencia humanitaria para los civiles en la Franja de Gaza sea recogida, almacenada, asegurada e inspeccionada rigurosamente antes de cargarla en un barco, todo ello aquí en Chipre”, agregó Constantinos Kombos, ministro de Asuntos Exteriores de Chipre.