Entre los escombros del terremoto de Turquía comienza a surgir el hedor de la corrupción y la negligencia.
En los restos de un edificio, ubicado en Ataturk Boulevard, una de las calles principales de Adiyamar, quedó sepultado por un descuido. El diputado Yakup Tas, miembro del Partido AK, murió bajo los escombros junto con 20 miembros de su familia, incluida su esposa.
Las autoridades hicieron todo lo posible para rescatarlo con vida, por ejemplo, destruyeron el edificio contiguo, pese a que en éste también había personas con vida.
“Cuando yo llegué nuestro edificio no estaba completamente colapsado, y el edificio de Yakup Tas sí estaba dañado. Los equipos de rescate pensaban que el asambleísta estaba vivo y para poder rescatarle han dañado nuestro edificio, y lo han conseguido, en cuatro horas lo han encontrado”, dijo la damnificada turca Amir.
El edificio dañado terminó por derrumbarse cuando los equipos de rescate realizaron maniobras para rescatar al parlamentario.
Mientras tanto, en el edificio contiguo, fallecieron el hermano de Amir y su cuñada embaraza y sus dos sobrinos.
Una vez rescatados sus cuerpos, las operaciones de rescate pararon por un día, después vino la excavadora e intentaron trabajar con ella y nosotros les dijimos: cómo vas a salir con la excavadora si tenemos aún familiares bajo los escombros. Lo malo es que habían sonidos de personas vivas en nuestro edificio detalló Amir.
Además, la damnificada aseguró que nadie de los equipos locales quiso intervenir en el edificio, tampoco les dejaron a las y los familiares intentar el rescate y sólo hasta tres días después, al llegar la ayuda internacional permitieron la labor de búsqueda, pero ya era demasiado tarde.
Reclamos
Esta situación se ha convertido en otro reclamo de las y los habitantes de Adiyaman, así como la demora con la que llegaron los servicios de emergencias para el rescate de las y los sobrevivientes.
Como Amir y Mahmed, miles de personas turcas piensan que el responsable de la tragedia que viven no es sólo del terremoto.
“Mis familiares están bajo los escombros, estaban los mexicanos y los suizos que nos ayudaron y Adiyaman, es una provincia alejada, lejos de toda ayuda. Como no es una ciudad grande, los primeros dos días no llegaron a ayudarnos. Pero después de dos días, empezaron a llegar ayudas de otros países”, declaró el damnificado Mahmed.
La Unión de Cámaras de Arquitectos e Ingenieros de Turquía dijo que esta situación se debe a las múltiples autorizaciones de edificios inseguros durante los años 20.
Tiempo que ha durado en el poder el Partido AK del presidente Recep Tayyip Erdogan, al que responsabilizan de que se derrumbaran por completo más de 6 mil edificios.
Durante su campaña en 2018, Erdogan ofreció la licencia, una especie de amnistía, a 300 mil inmuebles edificados de manera ilegal, ubicados en las 10 provincias más afectadas por el terremoto.
El resultado: constructores e inmobiliarios ricos y un millón de personas sin hogar tras el movimiento telúricos del lunes pasado y otras 36 mil sepultadas entres los escombros.