La presunta agresión sexual en grupo de una turista con doble nacionalidad brasileño-española en el estado de Jharkhand, en el este de India, desató indignación en ese país. La mujer de 28 años y su marido se habían detenido a pasar la noche en una carpa en el distrito de Dumki cuando se produjo el presunto ataque.
Como resultado, la policía india arrestó a otros cinco hombres relacionados supuestamente con este hecho. Con estos ya son ocho los detenidos. El pasado 4 de marzo, algunos de estos detenidos comparecieron ante un tribunal, con sacos en la cabeza, y fueron puestos en prisión preventiva.
Las autoridades indemnizaron con 12 mil dólares a la pareja, en el marco de un “plan de compensación de víctimas”.
“Siete hombres me han violado, nos han pegado y nos han robado, aunque no muchas cosas, porque lo que querían era violarme”, dijo la víctima en su cuenta de Instagram.
En otro video, el esposo de la mujer, dijo: “Mi boca está destrozada, pero mi pareja está peor que yo. Me golpearon con el casco varias veces, con una piedra en la cabeza“.
Los videos ya no están en su página de Instagram.
Agresiones sexuales en la India
En 2022, se reportaron en India una media de 90 agresiones sexuales diarias, según la oficina nacional de registro de delitos.
Sin embargo, muchas de estas agresiones no se notifican, por el estigma que suelen sufrir las víctimas y también debido a una falta de confianza en la labor de la policía. No suelen emitirse condenas y muchos de los casos acaban estancados en el sistema judicial del país, muy saturado.
Pero, en 2012, el caso de una estudiante que fue víctima de una agresión sexual grupal y luego asesinada puso en primera plana los altos niveles de violencia sexual que hay en India y dio lugar a semanas de protestas y a un cambio en la legislación, para castigar con la pena de muerte el delito de violación.