Donald Trump es por segunda vez presidente de Estados Unidos en medio de una crisis sanitaria provocada por el consumo de fentanilo, un opiáceo 50 veces más potente que la heroína y 100 más que la morfina.
En su primer día de gobierno, Trump firmó una orden ejecutiva para incluir a los cárteles de drogas en la lista de grupos terroristas, pero Estados Unidos omite el papel de los grupos criminales de ese país.
“No nada más los americanos cruzan la droga a los Estados Unidos, pero, ¿quién la está distribuyendo aquí en los Estados Unidos? La mayor parte son americanos”, dijo el exjefe de operaciones internacionales de la Administración de Control de Drogas (DEA), Mike Vigil.
Es necesario decir que 89% de los traficantes de fentanilo condenados en Estados Unidos en 2022 fueron ciudadanos de aquel país.
Mientras que 93% de las incautaciones de fentanilo en 2023 ocurrieron en puestos de control de cruces legales y no en rutas de migración indocumentadas.
Ese año, los 10 puertos de entrada en Arizona reportaron más incautaciones que en cualquier otro lugar en la frontera entre Estados Unidos y México, ¿cómo pasaron?
“Estas son las rutas internacionales del tráfico de fentanilo, por dónde llega el fentanilo. Se tienen identificadas cinco rutas”, detalló el exsecretario de la Secretaría de Defensa Nacional (Defensa), Luis Crescencio Sandoval.
Crescencio Sandoval apuntó que las rutas son China, hacia Alaska, China-Canadá y China-Estados Unidos.
“La que nos afecta son China-México e India-México, llegan a nuestras costas en el Pacífico”, agregó.
Estados Unidos no ha explicado lo que sucede en sus cruces fronterizos, qué ha hecho para frenarlo y por qué la ruta directa China-Estados Unidos sigue vigente.
En mayo de 2023, el expresidente Andrés Manuel López Obrador mandó una carta al presidente de China, Xi Jinping, para que frenara la llegada de fentanilo. El gobierno asiático lo negó, pero fue desmentido.
Otra ruta es por Canadá, en noviembre pasado la policía canadiense localizó un mega laboratorio de fentanilo. Cuestión que Justin Trudeau reconoció desde 2019.
“En la costa oeste, pero hemos visto una expansión de los opioides en todo el país y hemos visto una expansión en todos los niveles económicos y sociales en las comunidades”, explicó.
La presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum Pardo, ha sido clara en cuanto a este tema.
“Canadá también tiene un problema muy grave de consumo de fentanilo, y en algunos estados o ciudades donde se liberalizó el consumo se han generado problemas muy graves”, señaló.
Producción farmacéutica
Estados Unidos también olvida que fue en esa nación donde comenzó el problema, con la producción farmacéutica a gran escala de analgésicos en sustitución de la morfina. La industria descubrió una mina de oro a costa de la vida de las personas.
Por ejemplo, la medicación con oxycontin, de Purdue Pharma, enfrentó una demanda de gobiernos locales, estatales y miles de víctimas. Ahora debe pagar 7 mil 400 millones de dólares.
El daño está hecho, Trump acusa a otros, pero cuando ocupó por primera vez la Presidencia no atendió el problema.
“En 2013, ya estaba cogiendo fuerza la pandemia de fentanilo, entra Donald Trump, siempre promete cosas y no hace nada, entonces cuando entró a la presidencia, nadie en los Estados Unidos sabía exactamente quién estaba encargado de manejar esa pandemia de fentanilo”, finalizó el exjefe de Operaciones Internacionales de la DEA.