El Gobierno de México ha aplicado durante casi seis años una Política Exterior Humanista, que ha permitido impulsar la protección de connacionales en el exterior, la agenda multilateral y de derechos humanos, y la mirada hacia el sur a fin de que migrar sea una opción y no una necesidad.
“La Política Exterior Humanista se caracteriza por lo que ha dicho el Presidente [Andrés Manuel López Obrador]. La mejor política tiene una serie de principios del humanismo mexicano que han caracterizado estos seis años”, destacó Alicia Bárcena Ibarra, titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), durante la Conferencia Mañanera.
Los pilares de esta política, dijo, son los siguientes:
- Relación de amistad con Estados Unidos con respecto a la soberanía.
- Mirada al sur: cooperar con el sur global bajo los principios de autodeterminación de los pueblos y la no intervención
- Construcción de paz y seguridad internacionales: solución pacífica de las controversias.
- Solidaridad y fraternidad: refugio a personas migrantes, donación de vacunas y retorno asistido de la comunidad mexicana.
- Recuperación del patrimonio histórico: repatriamento del patrimonio y la memoria histórica.
- El legado del Modelo Mexicano de Movilidad Humana: migración una opción, no una obligación.
¿Qué avances se obtuvieron en cada uno de los pilares?
Respecto a la relación de Estados Unidos con México, Bárcena resaltó que ambos países han mantenido un diálogo permanente. Ejemplo de ello son las cartas que se han enviado entre los presidentes de estos países, la celebración de la novena y décima Cumbre de Líderes de América del Norte (CLAN) y de un foro sobre fentanilo, así como la creación de mecanismos bilaterales económicos.
En el pilar de mirada al sur, se logró que 30 países y 16 mandatarios, por primera vez, se reunieron en la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), una gira presidencial por Centroamérica, y la participación de México en el 50 aniversario del golpe de Estado en Chile, entre otros avances.
“La construcción de la paz y seguridad internacional es un sello en esta administración con litigios estratégicos, demandas contra las empresas armadoras por facilitar el tráfico de armas. Vamos bastante bien en Arizona y Massachusetts, ganando algunos de estos litigios”, detalló Bárcenas.
En este mismo ámbito, López Obrador propuso un programa para erradicar la pobreza extrema a partir de contribuciones.
En tanto en el objetivo de solidaridad y fraternidad, México fue el primer país de la región en recibir vacuna de COVID-19, y logró recibir 22 millones de dosis de vacunas de las cuales 16 millones fueron donadas por Estados Unidos.
Asimismo, las autoridades mexicanas consiguieron repatriar a 81 personas de Ucrania, 721 de Israel y 34 connacionales de Haití, y pusieron en marcha el Programa de Defensoría a Personas Mexicanas en Estados Unidos, en materia penal, en 2024.
De igual forma, brindó protección internacional a 82 personas provenientes de Bolivia, Ecuador, El Salvador, Perú y Venezuela en lo que va de la actual administración.
En cuanto a la recuperación del patrimonio mexicano, resaltó, se han recuperado 15 mil piezas prehispánicas y personajes históricos por decomisos o entregas voluntarias.
“El legado que queremos dejar este Modelo de Movilidad Humana sí tenemos una estrategia de migración porque regularizamos a las comunidades en el exterior, 5 millones de mexicanos han sido regularizados […] 7 mil 49 personas han sido retornada por México a sus países de origen”, agregó la titular de la SRE sobre el último pilar.
¿Qué legado deja esta política exterior en México?
Esta política exterior, comentó Bárcena Ibarra, deja un legado que vela por los siguientes elementos:
- Es la expresión del México Humanista que ha transformado el modelo de desarrollo.
- Se basa en principios y en el derecho.
- Promueve la fraternidad y la solidaridad entre los pueblos.
- Pone al centro a las personas orientadas a atender a las necesidades de las y los mexicanos tanto en territorio nacional como en el exterior.
- Solución pacífica de controversias y la no intervención como fundamento.