Los gobiernos de Estados Unidos y Japón acordaron reforzar su cooperación militar para contener posibles actos agresivos del Partido Comunista chino.
La reunión tuvo lugar en Tokio, donde el secretario de Defensa estadounidense, Pete Hegseth, se encontró con su homólogo japonés, Gen Nakatani.
Durante el encuentro, Hegseth subrayó el compromiso de Washington para mantener una disuasión robusta y creíble en la región del Indopacífico, con especial énfasis en la seguridad del estrecho de Taiwán, una zona clave para el equilibrio geopolítico en Asia.
“Japón estará en primera línea en caso de cualquier contingencia”, afirmó el funcionario estadounidense.
Great to be in Tokyo with PM @shigeruishiba. Our alliance remains strong—Thank you for hosting me today. pic.twitter.com/vfffEqcb5o
— Secretary of Defense Pete Hegseth (@SecDef) March 30, 2025
Taiwán en el centro de la estrategia
En su primera visita a Japón desde que asumió el cargo en enero, bajo el segundo mandato de Donald Trump, Hegseth destacó la necesidad de que sus aliados perciban la disuasión como “real y continua”, especialmente frente a las crecientes acciones coercitivas de Pekín.
“América primero no significa América sola”, añadió.
El jefe del Pentágono también señaló que, según su perspectiva, conflictos como la invasión rusa a Ucrania o los ataques de Hamás contra Israel no habrían ocurrido bajo el liderazgo anterior de Trump. Criticó a la administración pasada por “crear un vacío” que, en su opinión, debilitó la percepción de fuerza estadounidense.
Por su parte, el ministro japonés de Defensa, Gen Nakatani, declaró que la estabilidad del estrecho de Taiwán es crucial para la seguridad nacional de Japón. Subrayó que Tokio responderá a cualquier eventualidad “de acuerdo con su legislación y las normas internacionales”.
Ambos países reiteraron su compromiso con el diálogo pacífico, el comercio seguro y la estabilidad regional, enfatizando que cualquier conflicto debe evitarse mediante soluciones diplomáticas.