El asesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan, alertó este lunes que entregar armas a Rusia tendrá un “costo real” para China en el marco de la invasión rusa de Ucrania.
“Desde nuestra perspectiva, de hecho, esta guerra representa verdaderas complicaciones para Pekín, que tendrá que tomar sus propias decisiones sobre cómo proceder, si procede, para entregar o no asistencia militar”, aseveró Sullivan.
El funcionario manifestó que Estados Unidos “no está simplemente lanzando amenazas”, sino poniendo sobre la mesa las posibles consecuencias que acarrearían ciertas medidas.
Sus comentarios llegan en un momento de vital importancia en el marco del conflicto armado a raíz de varias informaciones de la Inteligencia estadounidense, que apuntan a que Pekín estaría considerando entregar a Rusia drones y munición para su uso en la guerra de Ucrania.
Desde que comenzó la invasión, Rusia ha solicitado en varias ocasiones munición y drones por parte de China, según fuentes de Inteligencia.
“Hace un año todos esperaban la caída de Kiev en cuestión de días. Un año más tarde, Joe Biden ha caminado junto a Volodimir Zelenski en Kiev a medida que la ciudad se mantiene en pie”, señaló Sullivan.
Además, Sullivan indicó que la administración Biden ha descartado, al menos de momento, entregar a Ucrania cazas F-16.
“Esta fase de la guerra requiere tanques, vehículos de combate, vehículos blindados, artillería y sistemas de defensa antiaérea para que las fuerzas ucranianas puedan recuperar el territorio que Rusia ocupa actualmente”, explicó.
Rusia no ve condiciones de final “pacífico” tras propuesta china
En tanto, Rusia juzgó que el plan propuesto la semana pasada por China para resolver el conflicto en Ucrania “merecía la atención”, pero que las condiciones necesarias para una solución “pacífica” no están reunidas por ahora.
“Consideramos el plan de nuestros amigos chinos con una gran atención (…) Es un largo proceso. Por ahora, no vemos las premisas para que este asunto pueda tomar una vía pacífica”, declaró a la prensa el vocero del Kremlin, Dmitri Peskov.
El viernes, justo un año después del inicio de la ofensiva rusa, China publicó un documento de 12 puntos en el que llama a Moscú y Kiev a negociaciones de paz.
Pero si China busca imponerse como mediador en este conflicto, su posición de aliada de Rusia la descalifica ante los ojos de Occidente, que apoya a Ucrania.
Rusia y Ucrania no mostraron hasta el momento ninguna voluntad seria de iniciar negociaciones, y reaccionaron con prudencia a la propuesta del gigante asiático.
Por otra parte, el Kremlin calificó este lunes de “absurdo” el nuevo paquete de sanciones impuesto por la Unión Europea (UE) a Rusia el viernes, y que apunta contra 121 individuos y entidades.
“Todo esto es absurdo. Vemos que colocan bajo sanciones a cualquiera (…), solo para hacer nuevas listas”, declaró Peskov, quien agregó que esas medidas no iban a ‘afectar’ a las personas sancionadas.