“Si echa un vistazo el informe, verá una imagen mixta de progreso”, dijo el secretario de Estado, Antony Blinken, al presentarlo.
La corrupción, según él, es una “herramienta principal” de los traficantes con la esperanza de que los gobiernos hagan la vista gorda.
El informe anual sobre la trata de personas del Departamento de Estado no duda en apuntar a aliados cercanos, lo que a menudo ha causado fricciones.
Los países que integran la lista negra, “nivel 3”, están sujetos a sanciones estadounidenses, pero por lo general el Gobierno renuncia al castigo para aquellos que se comprometen a implementar mejoras.
Vietnam, un país con una buena relación con Washington con quien comparte la preocupación por el ascenso de China, ha sido degradado al nivel 3. El informe encontró fallos, sobre todo porque Hanói no tomó medidas contra un diplomático vietnamita y un miembro del personal de la embajada destinado en Arabia Saudita que fueron acusados de complicidad en el tráfico de personas.
En Camboya, Estados Unidos estima que la “corrupción endémica” ha impedido ayudar a miles de personas, incluidos los niños, que son objeto de trata en establecimientos de ocio, hornos de ladrillo y operaciones de estafa en línea.
Mientras que en la ciudad china semiautónoma de Macao, un antiguo territorio portugués conocido por sus bulliciosos casinos y su industria del sexo, el informe dice que las autoridades no ayudaron ni a una víctima de trata por tercer año consecutivo.
En cuanto a Bulgaria, que junto con Serbia se ve amenazada con una degradación a la lista negra si no mejora, Washington estima que las autoridades investigaron a “muchos menos” traficantes y, en ocasiones, castigaron a las víctimas.
También se añadió recientemente a la lista negra el pequeño territorio caribeño holandés de San Martín.
Junto a Malasia, los países que permanecieron en la lista del año anterior fueron Cuba, Venezuela, Nicaragua, Afganistán, Eritrea, Guinea Bisau, Irán, Myanmar, Corea del Norte, Rusia, Sudán del Sur, Siria y Turkmenistán.
En contraste, Argelia y el Archipiélago de las Comoras en el Océano Índico salieron de ella este año.