Estados Unidos anunció este jueves un nuevo paquete de sanciones contra una veintena de funcionarios rusos, incluidos empleados bancarios, un grupo paramilitar neonazi y una estrecha colaboradora del presidente Vladimir Putin acusada de haber coordinado el desplazamiento forzado de niños ucranianos a Rusia.
“Estados Unidos continuará tomando medidas enérgicas para que Rusia rinda cuentas por sus crímenes de guerra, atrocidades y agresiones”, dijo la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, en un comunicado.
Así, unos 22 funcionarios y entidades se colocan en la lista negra de Estados Unidos, en particular familiares del líder checheno Ramzan Kadyrov, él mismo ya sancionado, y altos funcionarios del sistema bancario ruso, incluido Vladimir Komlev, que encabeza el sistema de pago Mir.
“Presentado como la mano derecha del presidente ruso, Kadyrov ha acumulado una riqueza extrema con una casa en los Emiratos, un zoológico privado, vehículos de lujo y un gran fondo para sobornos”, según el texto.
Al mismo tiempo, el Tesoro y el Departamento de Comercio prohibieron todas las exportaciones de materiales informáticos a Rusia y Bielorrusia, una medida que, según el Tesoro, impediría los esfuerzos de reconstrucción del ejército ruso, que ha sufrido grandes pérdidas en su guerra contra Ucrania, iniciada en febrero pasado.
El Tesoro también incluyó en su lista negra a Maria Alexeyevna Lvova-Belova, quien dirigía la Comisión presidencial para los Derechos del Niño. Según la institución, trabajando directamente con Putin, Lvova-Belova supervisó la deportación de “miles” de niños ucranianos a Rusia.
“El trabajo de Lvova-Belova incluía específicamente la adopción forzada de niños ucranianos en familias rusas, la llamada ‘educación patriótica’ de los niños ucranianos, cambios legislativos para acelerar la expedición de la ciudadanía de la Federación Rusa a los niños ucranianos y la remoción deliberada de niños ucranianos por las fuerzas rusas”, dijo.
Por último, Estados Unidos impuso sanciones a ‘Task Force Rusich’, un grupo paramilitar neonazi que lucha en Ucrania asociado con el ejército mercenario Wagner, controlado por el asesor cercano de Putin Yevgeny Prigozhin.
Objetivos de las sanciones
Las sanciones del Departamento del Tesoro tienen como objetivo congelar cualquier activo que los designados puedan tener bajo la jurisdicción de Estados Unidos y prohibir que cualquier individuo o empresa estadounidense, incluidos los bancos internacionales con operaciones en el país, hagan negocios con ellos, limitando su acceso a los mercados financieras globales.
Desde el inicio de la invasión rusa de Ucrania el pasado 24 de febrero, Estados Unidos ha impuesto en coordinación con sus aliados sanciones al sector financiero ruso, a Putin y a decenas de funcionarios, empresarios y oligarcas de ese país.
La guerra de Ucrania, estancada en el este del país desde hace meses, abrió esta semana una nueva fase con el repliegue ruso en la región de Járkov, que limita con el Donbás.
“A medida que Ucrania avanza en la lucha por su libertad, estamos tomando medidas para degradar aún más la capacidad de Rusia para reconstruir su Ejército, responsabilizar a los perpetradores de la violencia y aislar financieramente a Putin”, dijo la secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen.