El Departamento de Energía de Estados Unidos informó este viernes que comenzará a reconstruir sus reservas estratégicas de petróleo, utilizadas en gran volumen por el gobierno de Joe Biden para tratar de frenar el incremento del precio de la gasolina.
El gobierno espera comprar el crudo por debajo de la media de 96 dólares a la que fue vendido un importante volumen de petróleo almacenado en estos inventarios estratégicos (SPR por sus siglas en inglés).
La campaña de compra se iniciará con 3 millones de barriles de crudo, indicó el Departamento de Energía en un comunicado.
Con la subida general de precios que siguió a la pandemia, profundizada por la guerra en Ucrania desde febrero, los precios del barril alcanzaron los 120 dólares este año.
El gobierno decidió utilizar parte de estos stocks para contener el alza de precios de la gasolina.
El uso de estos stocks “contribuyó a bajar los precios de la gasolina“, actualmente en un piso desde setiembre de 2021, sostuvo el gobierno.
En octubre, Biden anunció que el gobierno comenzaría a comprar petróleo para reconstituir estas reservas.
El petróleo cae en mercado preocupado por perspectivas económicas
Los precios del petróleo bajaron el viernes, lastrados por las alzas de tasas de los bancos centrales esta semana, que alimentan la perspectiva de una recesión mundial.
El barril de Brent del mar del Norte para entrega en febrero cedió 2,67% a 79,04 dólares en Londres.
En tanto en Nueva York, el West Texas Intermediate (WTI) para entrega en enero perdió 2,39% a 74,29 dólares el barril.
Las reuniones de los bancos centrales de Estados Unidos el miércoles, y del Banco de Inglaterra y el Banco Central Europeo el jueves, generaron una atmósfera de aversión al riesgo, constataron los analistas de DNB.
Los principales bancos centrales del mundo subieron en todos los casos medio punto porcentual sus tasas de referencia.
Tanto la Fed como el BCE manifestaron que los aumentos podrían continuar para combatir la inflación.
Estas “advertencias reavivaron temores sobre el crecimiento económico, y enfriaron los perspectivas de demanda de petróleo“, resumió Stephen Brennock, analista de PVM Energy.
En paralelo, el anuncio el jueves de la reapertura del oleoducto Keystone luego de una fuga que provocó una semana de suspensión de actividades, presionó a la baja los precios del oro negro.