El Departamento del Tesoro de Estados Unidos volvió a imponer sanciones contra nueve empresas estatales en Bielorrusia por violaciones y abusos de derechos humanos después de que el Gobierno de Alexander Lukashenko no haya liberado a los presos políticos capturados durante la represión en torno a las fraudulentas elecciones de agosto de 2020.
Por su parte, el Departamento de Estado recordó que la revocación de la Licencia General (LG) relacionada con Bielorrusia y la implementación de una liquidación de transacciones de 45 días se han revocado en una consecuencia más del flagrante desprecio de las autoridades bielorrusas por los derechos humanos y del incumplimiento por parte de Bielorrusia de sus obligaciones en virtud del derecho internacional de los mismos.
En 2015, el Departamento del Tesoro, en consulta con el Departamento de Estado, emitió el LC autorizando a los estadounidenses a participar en ciertas transacciones con nueve empresas estatales bielorrusas sancionadas. El LC se había renovado anualmente hasta 2020 debido a los notables avances de las autoridades bielorrusas en materia de Derechos Humanos, en particular la liberación de todos los presos políticos durante este tiempo”, señaló Antony Blinken, secretario de Estado estadounidense.
Una nueva extensión sería incompatible con la Ley de Democracia de Bielorrusia y con los valores estadounidenses. Las nueve empresas estatales afectadas por esta acción financian apoyan al régimen de Lukashenko, facilitando su violenta represión del pueblo bielorruso y el reiterado rechazo del estado de derecho”, agregó.
Así, señaló que la vuelta de las sanciones se debe al grave deterioro de los derechos en el país como resultado de la represión del Gobierno de Lukashenko en el marco de las fraudulentas elecciones presidenciales de agosto de 2020 y sus secuelas, ya que hay más de 340 presos políticos detenidos.
En concreto, el área de Blinken dijo que la regresión de Bielorrusia se ejemplifica con la detención de aspirantes a políticos como Syarhey Tsikhanouski, líderes activistas valientes como Maria Kalesnikava y expertos en medios independientes como Ihar Losik.
De este modo, Estados Unidos ha pedido a las autoridades bielorrusas que pongan en libertad de forma inmediata e incondicional a todos los detenidos o encarcelados injustamente y se ha comprometido a trabajar con la comunidad internacional para promover aún más la rendición de cuentas en el país.