El 74% del total de armas fabricadas en Estados Unidos y que terminan en manos del crimen tiene como destino a México, reconoce un informe del Departamento de Justicia norteamericano, publicado este 8 de enero de 2025.
El documento, elaborado por el Buró para Alcohol, Tabaco, Armas y Explosivos (ATF, por sus siglas en ingles) de la misma dependencia, fue referido por la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, y el titular de la Fiscalía General de la República (FGR), Alejandro Gertz Manero, durante la Mañanera del Pueblo.
El fiscal aseveró que es muy significativa la información del Departamento de Justicia norteamericano porque revela la corresponsabilidad en la violencia que padece México.
“Toda la fuerza de los carteles delictivos está en su capacidad de fuego, está en su armamento, y eso lo sufrimos a diario”, declaró.
El documento publicado por el Gobierno estadounidense, que se titula Protegiendo a Estados Unidos de las armas de fuego traficadas, identifica que las armas recuperadas en territorio mexicano se fabrican principalmente en los cuatro estados de la frontera sur norteamericana: Nuevo México, Arizona, Texas y California.
“Análisis subsecuentes indican que los traficantes trasnacionales de armas explotan los mismos canales criminales que los traficantes domésticos para sustraer las armas del comercio legal”, apunta el estudio.
Las entidades mexicanas donde más se recuperaron armas ilegales de origen estadounidense fueron Sonora, Tamaulipas, Nuevo León, Chihuahua y Guanajuato, en orden descendente, originarias de Arizona y Texas.
En contraste, el mismo reporte señala que, de los países que venden armas a Estados Unidos, México aporta únicamente el 0.1%.
El documento elaborado por el Departamento de Justicia emite como recomendaciones para atender el fenómeno que las agencias de seguridad estadounidenses evalúen la reventa discrecional de armas, se expanda la red digital de información nacional balística y se prevenga el tráfico mediante la prohibición a las personas de adquirir y poseer estas armas.