Francia Márquez irrumpió a toda Colombia, mujer, feminista, campesina, defensora ambiental, madre a los 16, empleada del servicio doméstico que ahora se ha convertido, en punto de referencia colombiano.
De madre campesina, partera y minera, Francia Márquez lleva su tierra en la ropa, en su piel y en su forma de hablar. Su candidatura a la vicepresidencia con la fórmula que encabeza Gustavo Petro y su discurso, terminaron con la discusión sobre si en Colombia hay o no racismo.
“Llegó el momento en que los negros y las negras. Los indígenas, los campesinos, los sectores populares, la gente históricamente excluida, nos cojamos de las manos para sacar adelante esta Nación”, mencionó Francia Márquez, candidata a la vicepresidencia de Colombia por Coalición Pacto Histórico.
Su lucha ha interesado a millones de ciudadanas y ciudadanos colombianos, pero sobre todo se ha convertido en un ícono que admiran millones de mujeres.
“A nosotros nos han enseñado que, si no tenemos un nombre, un apellido, no venimos de ciertas familias, no vamos a poder surgir y eso es falso pues vemos que en este momento Francia ha construido mucho”, dijo Ana María Tarazona, estudiante colombiana.
Francia Márquez rebate a los que han tenido el control de Colombia, que le acusan de falta de experiencia.
“Muchos dicen que no tengo experiencia para acompañar a Gustavo Petro a gobernar este país. Y yo me pregunto, ¿por qué la experiencia de ellos no nos permitió vivir en dignidad? ¿por qué la experiencia generó más de ocho millones de víctimas en este país?”, cuestionó Francia Márquez.
Francia Márquez y Gustavo Petro buscan tomar las riendas de Colombia, él por la presidencia, ella por la vicepresidencia. Su voz se ha convertido en fuerza y arrastre. Es, a decir de las suyas, una mujer que nace de las entrañas del territorio.
“Francia Márquez, cuando hablamos de una mujer que nace de las entrañas de los territorios, una mujer que ha vivido y pasado por historias que son historias qué es la historia de muchas mujeres en este país”, señaló María Eugenia Ramírez, activista feminista.
Márquez ha mencionado que ella no pidió estar en la política, pero ha vivido los embates de la política patriarcal, hegemónica racista y clasista, la cual desea transformar.
“Claro que la conocimos por su famosa movilización de los turbantes, cuando vino con las mujeres de sus comunidades a exigir lo que tienen que exigir y es que se le respeten sus derechos colectivos y su derecho un ambiente sano”, dijo Mafer Carrascal, política colombiana.
Tal como tomó el ministerio del interior, junto a otras mujeres de su comunidad en 2014, ahora, podría tomar las riendas de su país por la vía electoral; ha roto estereotipos y es la mujer que ha puesto en la boca de colombianas y colombianos la idea de exigir los derechos básicos para cualquier persona, para “vivir sabroso”.
“Igual es importante el tener derechos básicos que te puedan a ti a ser vivo y sabroso, vivir tranquilo, vivir bien, vivir dignamente, Sabroso es vivir sin deudas vivir sabroso es estar en las calles con tranquilidad no hay miedo al robo, vivir sabroso es ir a comer carne papá tomar café tranquilamente sin generar un costo elevado qué es lo que está pasando en este momento en otro país”, dijo Laura Sernas, estudiante colombiana.
Ganadora del Premio Goldman en 2018, por la defensa de su territorio contra las empresas mineras, Francia es ahora, la posibilidad de otra Colombia.
“Ella encarna una esperanza de cambio para el país, ella siempre está alimentándonos de resistencia”, mencionó Eliana Valencia, activista afrocolombiana.
Como mujer, el primer reto, será ganar la vicepresidencia y después vendrán los mayores desafíos. Pese a los ataques o a las intimidaciones, Francia Márquez busca sanar un país herido y construir otras realidades.
“Cerca del 46% de las mujeres viven de la informalidad, erradicar la pobreza en este país, es un reto, pero erradicar la pobreza con los lentes de las mujeres, es un desafío”, señaló María Eugenia Ramírez, activista feminista.
