En Texas, desde la semana pasada, han sido detenidos por la patrulla fronteriza más de 400 migrantes.
Para supervisar lo que allá ocurre, una delegación de funcionarios y congresistas visitó el Centro de Carrizo, en Texas, donde fueron ubicados 750 menores centroamericanos.
A pesar de que se mantiene la privacidad y estamos bajo la pandemia, estas instalaciones serán abiertas a la prensa todo el día”, declaró Jen Psaki, vocera de la Casa Blanca.
Ante el continuo flujo migratorio, el Departamento de Defensa analiza facilitar dos instalaciones que administra en El Paso y San Antonio, en suelo texano, para hospedar a más menores migrantes.
La vicepresidenta, Kamala Harris, reconoció que Estados Unidos necesita aumentar la capacidad de procesar las demandas de asilo y de acoger a los migrantes que huyen de la pobreza, la violencia y los desastres naturales en América Central.
“Es un gran problema”, dijo Harris en una entrevista con la cadena CBS en la que también afirmó que el gobierno heredó una estructura muy maltrecha de la anterior administración, que además defendió una política muy agresiva contra la inmigración irregular.