Planned Parenthood anunció planes para una clínica de aborto móvil, es decir un vehículo de poco más de 11 metros, que permanecerá en Illinois, pero viajará cerca de las fronteras de los estados colindantes que prohibieron el procedimiento desde que la Corte Suprema anuló Roe vs. Wade a principios de este año.
El anuncio se produjo 100 días después del fallo de la Corte Suprema que eliminó las protecciones constitucionales para el aborto y permitió que los estados prohibieran el procedimiento. Illinois no instituyó una prohibición del aborto, pero los vecinos Missouri, Kentucky y Tennessee sí lo hicieron, junto con varios otros estados del sur y el medio oeste.
Como resultado, ambas clínicas de aborto en el lado de Illinois de la región de St. Louis, incluida una operada por Planned Parenthood en Fairview Heights, se han visto inundadas de pacientes.
Los líderes de la oficina de St. Louis Planned Parenthood dijeron que desde junio, la clínica de Fairview Heights ha visto un aumento de 30% en las pacientes que abortan, una tasa que, era incluso más alta de lo que esperaban. Los pacientes de fuera de Missouri e Illinois aumentaron en más de 340%.
La avalancha de pacientes significa esperas más largas. Yamelsie Rodríguez, presidenta y directora ejecutiva de Planned Parenthood de la región de St. Louis y el suroeste de Missouri, dijo que los tiempos de espera para las citas de aborto pasaron de un promedio de cuatro días antes del fallo de la Corte Suprema a dos semanas y media.
“La clínica de aborto móvil es una manera de reducir los tiempos y las distancias de viaje para encontrar a los pacientes en la frontera de Illinois”, dijo la Dra. Colleen McNicholas, directora médica de la oficina de St. Louis de Planned Parenthood.
La clínica móvil viajará cerca de las fronteras del sureste de Missouri, el oeste de Kentucky y el noreste de Tennessee. Rodríguez dijo que se espera que el RV llegue este mes y debería estar operativo a finales de año.
La clínica incluirá dos salas de examen, un laboratorio y una sala de espera. Inicialmente, proporcionará abortos con medicamentos hasta las 11 semanas de gestación. Planned Parenthood intentará comenzar a ofrecer abortos quirúrgicos en la clínica después de los primeros meses.
Ante ello, Laura Echevarria, vocera del Comité Nacional por el Derecho a la Vida, que se opone al aborto, llamó a la clínica móvil de abortos “otro grotesco degradante de la vida humana”.
“Los abortos químicos pueden provocar complicaciones potencialmente mortales ¿Las mujeres reconocerán esas complicaciones lo suficientemente temprano como para buscar tratamiento?”, dijo Echevarria en un comunicado.
Se han iniciado otros esfuerzos en todo el país para aumentar el acceso al aborto. La organización sin fines de lucro Just The Pill opera una clínica móvil en Colorado que ofrece abortos con medicamentos.
La portavoz Kat Mavengere dijo que a principios del próximo año, también en Colorado, Just The Pill operará una clínica móvil para procedimientos de aborto. La organización también planea expandirse a otras áreas, comenzando con una clínica móvil en Illinois en 2023.
En julio, un médico de California propuso una clínica de aborto flotante en el Golfo de México como una forma de mantener el acceso para las personas en los estados del sur donde se han promulgado prohibiciones del aborto. La doctora, Meg Autry dijo que la idea era proporcionar una clínica a bordo de un barco en aguas federales y fuera del alcance de las leyes estatales.
Mientras tanto, algunas ciudades lideradas por demócratas como St. Louis han reservado dinero para ayudar a las mujeres embarazadas a viajar a estados donde los abortos son legales.
¿Qué ocurrió?
La reversión del derecho al aborto determinada el 24 de junio por la Corte Suprema de Estados Unidos está poniendo en disyuntiva al personal de salud, repercutiendo en tratamientos y atención médica, advierten especialistas.
Incluso en casos de emergencia, el personal de salud está rechazando el tratamiento inmediato, como ocurrió ya en una clínica de abortos de Ohio, que recibió llamadas de dos mujeres con embarazos ectópicos (cuando un embrión crece fuera del útero y no se puede salvar), las mujeres acudieron a esa instancia tras declarar que sus médicos no las quisieron atender.
“Tanto para los médicos como para los pacientes, este es un momento aterrador y tenso, con nuevas preocupaciones sin precedentes sobre la privacidad de los datos, el acceso a la anticoncepción e incluso cuándo comenzar la atención para salvar vidas”, mencionó Jack Resneck, presidente de la Asociación Médica Estadounidense.