Los países del G7 de las economías más industrializadas prometieron cesar el financiamiento de proyectos de energías fósiles en el extranjero para finales de 2022, con el objetivo de ayudar a la lucha contra el calentamiento global.
Además, los líderes del mundo se comprometieron a ‘descarbonizar’ la mayor parte de su sector eléctrico “de aquí a 2035” para combatir el calentamiento global, en particular mediante “la eliminación progresiva del carbón”, según una declaración conjunta.
“Nos comprometemos a lograr un sector eléctrico predominantemente descarbonizado para 2035 y a apoyar la aceleración de la eliminación mundial del carbón”, según una declaración conjunta tras una reunión de ministros de Clima y Energía en Berlín.
Para lograr este objetivo, el grupo de países prometieron “poner fin a las ayudas públicas directas para proyectos sin mitigación en el sector de las energías fósiles”, indicaron los ministros.
El término “sin mitigación” se refiere a proyectos que no usen alguna técnica para contrarrestar la contaminación provocada por las emisiones de dióxido de carbono.
Esta es la primera vez que las siete potencias industriales (Estados Unidos, Japón, Canadá, Francia, Italia, el Reino Unido y Alemania) se comprometen a un objetivo en este sentido.
Cesar los subsidios para proyectos internacionales que usen las energías fósiles fue una de las resoluciones adoptadas por 20 países en la Conferencia del Clima COP26 celebrada en Glasgow el año pasado.
Entonces, todos los países del G7 menos Japón habían adherido a este compromiso.
“Es bueno que Japón, que es el principal financista de los combustibles fósiles en el mundo se haya unido a los otros países del G7”, indicó Alden Meyer, experto del centro de estudios europeos E3G.