Los trabajadores migrantes en EUA que denuncien ser víctimas y también sean testigos de violaciones a la ley laboral por parte del empleador, serán protegidos por la administración Biden, de ser deportados o de perder sus empleos.
Es común que los obreros sean explotados, ya que reciben bajos salarios por carecer de visa de trabajo.
También tienen miedo de denunciar violaciones a la ley laboral por temor a ser despedidos.
El secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, exhortó a los trabajadores indocumentados a cooperar con las autoridades y denunciar irregularidades en sus empleos, y reiteró que no serán deportados.
Con este fin, ordenó al Servicio de Migración, detener las redadas en los lugares de trabajo, porque esto desalienta a los obreros a cooperar con las investigaciones.
La práctica de Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) de ofrecer protección discrecional caso por caso a las víctimas que no tienen autorización de empleo, aumenta directamente la capacidad de las agencias laborales para investigar más a fondo las violaciones en el lugar de empleo.
Ofrecer protección discrecional también apoya a estas agencias en el cumplimiento de su misión y ayuda a responsabilizar a los empleadores abusivos, lo que protege a todos los trabajadores estadounidenses.
Los cambios en el proceso anunciados hoy simplificarán el ejercicio de la autoridad existente de DHS para otorgar dicha protección.