
El gobierno de Gran Bretaña anunció que se ha preparado activamente para enfrentar cualquier afectación ante los aranceles que se prevé aplique Estados Unidos el 2 de abril a varios países.
El vocero del primer ministro británico, Keir Starmer, dijo que confían en que continúen las conversaciones que mantienen con Washington, para negociar un nuevo acuerdo económico que evite las tarifas después del miércoles, fecha prevista para la aplicación de los aranceles recíprocos.
La agencia Reuters informó que el primer ministro Starmer conversó con el presidente Donald Trump, una plática que fue “productiva“, de acuerdo con el gobierno británico.
Por su parte, los ministros británicos no descartan opciones para responder a las medidas impositivas unilaterales de Trump, aunque minimizan la probabilidad de aplicar represalias inmediatas contra productos estadounidenses, ya que, aseguran, una guerra comercial perjudica el crecimiento económico a nivel mundial.