El ejército de Somalia afirmó que había matado a decenas de combatientes islamistas de Al Shabab que atacaron dos bases militares, en tanto la policía informó de la muerte de cinco civiles en un atentado suicida en Mogadiscio.
A primera hora de la mañana, combatientes de Al Shabab, un grupo afiliado a Al Qaida, atacaron dos importantes bases militares en Somalia, con coches bomba y violentos enfrentamientos en las dos localidades.
Los ataques ocurrieron en la región de Lower Shabelle, en el sur del país, en las ciudades de Awdheegle y Bariire (separadas de unos 30 km). En los dos casos, se trata de bases de operaciones en la lucha contra el grupo islamista.
El ejército mató a 76 combatientes y capturó a otros 10 con vida durante los combates”, declaró a la prensa el comandante Mohamed Tahlil Bihi, precisando que “los ataques terroristas fueron abortados”.
Sin embargo, no aportó detalles sobre las bajas registradas por el ejército.
Un testigo en Awdheegle, donde se encuentra la mayor de las instalaciones, dijo que las tropas somalíes expulsaron a los islamistas después de una hora de intensos enfrentamientos.
Los hombres armados de Al Shabab utilizaron un vehículo cargado con explosivos para iniciar el ataque, pero casi una hora después no habían conseguido entrar en la base” tras combatir con las tropas somalíes, explicó por teléfono Mohamed Ali.
- En Bariire, los islamistas también hicieron detonar un coche bomba antes de atacar la base.
Al Shabab reivindicó el ataque en un comunicado en una web afín a la organización, afirmando que había matado “a 47 soldados dentro del campo”.
Sin embargo, ni este balance ni el aportado por el ejército pudieron ser contrastados de forma independiente.
Este grupo islamista, afiliado a la red Al Qaida, dirige desde hace años una rebelión para derrocar al frágil gobierno somalí, apoyado por la comunidad internacional.
Fueron expulsados de Mogadiscio en 2011 por la fuerza de la Unión Africana (UA), la Amismom, pero continúan controlando extensas áreas de Somalia, un país sumido en el caos desde 1991.
Por otro lado, cinco civiles, incluyendo un niño, murieron en el ataque de un kamikaze contra un salón de té, informó la policía.
Hacia las siete de la tarde un atacante suicida hizo detonar su carga en un salón de té frecuentado por jóvenes”, indicó el portavoz policial, Sadiq Dudishe.
Cuatro jóvenes y un niño murieron, indicó, así como el propio atacante. “Otras cuatro resultaron heridas”, agregó.