Un zapato abandonado es testigo mudo del secuestro de cientos de estudiantes de secundaria en Katsina, Nigeria, sustraídos por el grupo yihadista Boko Haram.
En un mensaje de voz, el grupo terrorista reivindicó el secuestro, por motivos religiosos.
Soy Abubakar Shekau y nuestros hermanos están detrás del secuestro en Katsina. Lo que sucedió ahí se hizo para desalentar las prácticas no islámicas, ya que la educación occidental no es el tipo de educación permitido por Alá y su santo profeta”, dijo el líder del grupo Boko Haram de Nigeria.
Las autoridades de Katsina informaron que al menos 333 adolescentes están desaparecidos desde el viernes pasado, luego de que un centenar de hombres armados, atacaron por la noche una escuela rural para hombres.
Decenas de adolescentes lograron huir y refugiarse en un bosque aledaño, pero cientos fueron atrapados por los agresores, que se los llevaron con rumbo desconocido.
Cuando decidí correr, trajeron un cuchillo para matarme pero escapé rápidamente. Me encontré con la multitud. No pudieron atraparme, luego me puse mi ropa al revés para que no pudieran verme. Dijeron que matarían a cualquiera que intentara escapar”, describió Usama Aminu, estudiante rescatado.
El gobierno nigeriano busca un acuerdo con los secuestradores para que devuelva a los estudiantes sanos y salvos.
Madres y padres exigen el regreso de sus hijos.
Queremos que rescaten a nuestros niños porque tienen la capacidad para hacerlo, pero sus acciones son lentas porque no son sus hijos los que están involucrados en el incidente”, señaló Zainab Muhammed, madre de niño secuestrado.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU), exigió la liberación de los estudiantes y que los responsables sean llevados ante la justicia.
En 2014, Boko Haram secuestró a 276 niñas de Chibok, de las cuales 112 siguen desaparecidas.
De acuerdo con UNICEF, el grupo terrorista ha secuestrado a más de mil niños desde 2013.