En Haití, un día después del asesinato del presidente, Jovenel Moise, a manos de un comando armado, la policía mantiene la búsqueda de más atacantes; tras abatir a cuatro y detener a dos.
Las autoridades no han informado sobre la identidad de los mercenarios, ni el móvil.
Cuatro mercenarios murieron, dos fueron interceptados bajo nuestro control. Se han recuperado tres policías que habían sido tomados como rehenes”, comentó Leon Charles, director general Policía.
A la esposa del presidente la reportan fuera de peligro y convalece en un hospital de Miami, Estados Unidos, a donde fue trasladada ayer mismo.
En Haití rige el estado de sitio, sólo se autorizan actividades esenciales, como el comercio y los servicios básicos.
Diez mil soldados dominicanos vigilan el cierre de la frontera común para impedir el tránsito de personas, automóviles y los camiones de carga.
Este jueves, el papa Francisco condenó este “atroz asesinato”.
El consejo de seguridad de la ONU se reunirá de emergencia, a puerta cerrada este jueves, para analizar la situación.
Pidió que los autores del asesinato sean entregados rápidamente a la justicia.
Tenemos que esperar a lo que arroje la investigación, la policía está haciendo su trabajo y entonces sabremos lo qué pasó”, dijo Helen La Lime, enviada especial de la ONU a Haití.