La Fiscalía Federal de Estados Unidos imputó este viernes al senador demócrata Robert Menéndez por soborno y extorsión, y declaró que encontraron lingotes de oro y cientos de miles de dólares en efectivo en su domicilio.
En una de las acusaciones, el Departamento de Justicia afirmó que Menéndez, que preside la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, había facilitado información sensible a Egipto para ayudar a un empresario egipcio-estadounidense a proteger su monopolio.
Se trata de la segunda acusación de corrupción en ocho años contra el político de Nueva Jersey, de 69 años, y puede hacer peligrar su posición, y con ella la escasa mayoría del Partido Demócrata en el Senado.
“El senador y su esposa aceptaron cientos de miles de dólares en sobornos a cambio de que el senador Menéndez utilizara su poder e influencia para proteger y enriquecer a esos empresarios y beneficiar al gobierno de Egipto”, declaró Damian Williams, fiscal federal del distrito de Manhattan, Nueva York.
En un comunicado, Menéndez, de origen cubano, tildó las acusaciones de “infundadas” y de ataque personal contra él y su esposa Nadine Menéndez, que también fue acusada en la misma causa.
“Han tergiversado el trabajo normal de una oficina del Congreso. Los que están detrás de esta campaña simplemente no pueden aceptar que un latinoamericano de primera generación y de origen humilde pueda llegar a ser senador de Estados Unidos y servir con honor y distinción”, dijo Menéndez.
Los fiscales dijeron que se encontraron más de medio millón de dólares en efectivo en la casa de Menéndez en Nueva Jersey y en la caja de seguridad de su esposa Nadine Menéndez, supuestamente recibidos de tres empresarios que buscaban su ayuda.
Gran parte del dinero estaba metido en sobres y cajas y escondido por toda la casa, así como en chaquetas con el nombre del veterano senador.
También se encontraron lingotes de oro por valor de unos 150 mil dólares y un lujoso Mercedes Benz descapotable regalado por uno de los empresarios.
Menéndez aceptó el dinero para ayudar a proteger a dos de los empresarios de las investigaciones del departamento de Justicia y para ayudar al tercero, un egipcio-estadounidense, con un monopolio empresarial que le había concedido el gobierno egipcio, según la acusación.
“Menéndez proporcionó información sensible del gobierno de Estados Unidos y adoptó otras medidas que ayudaron secretamente al gobierno de Egipto”, dice la acusación.
El senador, su esposa y los tres empresarios, Wael Hana, José Uribe y Fred Daibes, fueron acusados de dos cargos de soborno y fraude. Menéndez y su esposa también fueron acusados de extorsión. De ser declarados culpables, los cargos más graves pueden acarrear hasta 20 años de prisión.