
El grupo de resistencia armada Hamás liberó al ciudadano israelí-estadounidense Edan Alexander, para buscar negociaciones que lleven a un cese al fuego definitivo.
Alexander es el primer soldado liberado entre los militares cautivos y el último rehén estadounidense con vida en Gaza.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, advirtió que detuvo los ataques en Gaza, para permitir la salida del rehén, pero que no habrá otro cese al fuego, ni liberación de personas palestinas detenidas.
Los habitantes de la Franja de Gaza exigieron un cese al fuego inmediato, total y permanente.
“Nosotros, como habitantes de Gaza, exigimos al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que detenga la guerra, un cese permanente y total de la guerra, que reconstruya, que reabra los cruces y que permita el ingreso de ayuda humanitaria”, pidió Ayman Nassar, palestino desplazado.
La grave situación humanitaria ha puesto en riesgo de desnutrición aguda a 71 mil niños y niñas gazatíes, advirtió UNICEF.
Mientras, medio millón de personas enfrentan hambruna, por el bloqueo israelí y por la destrucción de la producción agrícola local, denunció la FAO.

“Cuando se ve tanta devastación y se sabe que la mayoría, el 75 a 80% de las tierras agrícolas ya han sido destruidas o debilitadas, recuperar parte de esa producción local requerirá una inversión significativa de la comunidad mundial y una cantidad significativa de tiempo”, advirtió la directora adjunta de la FAO, Beth Bechdol.
En tanto, la Comisión de Asuntos de Prisioneros y Exprisioneros Palestinos, denunció que las fuerzas de seguridad israelíes han detenido a 770 niños y niñas en Cisjordania, desde que comenzó la incursión israelí en Gaza, en octubre de 2023.
El organismo detalló que los arrestos se dieron bajo duras condiciones que, en muchas ocasiones, implicaron abusos físicos y psicológicos, lo que constituye una flagrante violación de las leyes internacionales que garantizan la protección de las infancias.