El Papa Francisco estará hospitalizado durante varios días para recibir tratamiento de una infección pulmonar después de experimentar dificultad para respirar en los últimos días, confirmó el Vaticano.
El portavoz del Vaticano, Matteo Bruni, informó que Francisco, de 86 años, no tiene COVID-19, pero requiere varios días de terapia.
El Papa Francisco sufrió algunos problemas respiratorios en los últimos días y fue trasladado a un hospital en Roma para ser sometido a pruebas médicas.
El Vaticano señaló asimismo que “el Papa Francisco está conmovido por los muchos mensajes recibidos y expresa su agradecimiento por la cercanía y la oración”.
Las pruebas mostraron una infección respiratoria (excluida la infección por COVID-19) que requerirá algunos días de terapia médica”, según el comunicado de Bruni.
Los problemas de salud que aquejan al pontífice
El pontífice argentino tiene diverticulitis, una enfermedad que puede infectar o inflamar el colon, y fue operado en este mismo centro de salud de la capital italiana en julio de 2021, en un delicado procedimiento para extirparle parte del colon.
También tiene artritis en la rodilla derecha, por lo que se traslada en silla de ruedas desde mayo de 2022, y en ocasiones utiliza un bastón para ayudarse a caminar.
A principios de año, Francisco afirmó que la condición había regresado y que le estaba causando un aumento de peso, pero que no estaba demasiado preocupado. No dio más detalles.
La mayor intervención quirúrgica que Jorge Bergoglio sufrió antes fue en 1957, a los 21 años, cuando, siendo seminarista en Villa Devoto, por una pulmonía grave se le extirpó el lóbulo superior del pulmón derecho en el Hospital Sirio Libanés.