El Gobierno francés anunció este jueves nuevas medidas restrictivas de la vida social ante la inquietud de un agravamiento de la situación epidémica debido a la evolución del Covid-19 en países vecinos, que registran ahora cifras mucho peores.
El primer ministro, Jean Castex, comparecerá junto a los otros ministros directamente implicados en esta crisis para presentar esas medidas, entre las que se considera muy probable que esté el adelanto del toque de queda nocturno en el conjunto del país de las 20:00 horas actualmente a las 18:00 horas.
Los primeros resultados del dispositivo muestran una ralentización, según el ejecutivo.
No se espera que Castex decrete un nuevo confinamiento porque por ahora el número de casos en Francia no se está disparando y se encuentra muy lejos de los picos de octubre, cuando empezó el segundo confinamiento que se prolongó hasta el 15 de diciembre.
Este miércoles 13 de enero se registraron 23 mil 852 nuevos contagios en 24 horas y 232 muertes adicionales, con lo que se superó el listón de los 69 mil fallecimientos desde el inicio de la pandemia.
En cualquier caso, hay varios elementos de inquietud, en primer lugar por el temor de que se reproduzca en Francia el escenario de una rápida propagación de la variante británica del coronavirus, mucho más contagiosa.
Un estudio realizado la semana pasada mostró que un 1% de los positivos en el país correspondían a esa cepa.
Además, aunque no haya una explosión de nuevos casos, la tendencia es ascendente.
Eso se deja sentir en los hospitales, donde el número de camas ocupadas por enfermos de Covid-19 se mantiene prácticamente estancado a un nivel elevado, algo por debajo de las 25 mil desde hace varias semanas.