Israel presentó ante la Corte Internacional de Justicia de la ONU, sus alegatos, en el segundo y último día de juicio en su contra.
Rechazó la acusación de Sudáfrica, de que ha cometido un genocidio en Gaza contra la población palestina. Sus abogados reiteraron que nunca en la ofensiva militar, comenzada el 7 de octubre, se violó la convención contra el genocidio, firmada en 1948 por Israel.
“La Convención sobre el Genocidio fue una promesa hecha al pueblo judío y a todos los pueblos por un ‘Nunca más’. Pero la parte que demanda invita al tribunal a traicionar esa promesa; la Convención se convierte en un espacio para el agresor”, dijo Tal Becker, abogado de Israel.
Israel defendió su derecho a defenderse, tras los ataques de la organización Hamás contra su territorio hace más de tres meses, en los que murieron mil 140 personas.
Como pruebas mostraron declaraciones de líderes de Hamás llamando a atacar Israel, fotografías de ataques con cohetes y de las mil 140 víctimas.
“El daño causado a objetivos militares legítimos y el daño causado como resultado de las acciones de Hamás no son prueba de genocidio”, comentó Galit Raguan, abogada del Estado de Israel.
Frente al tribunal, en La Haya, Países Bajos, manifestantes exigieron suspender de inmediato los bombardeos israelíes.