Israel registró mil 837 nuevos casos de coronavirus, la cifra más alta desde principios de octubre y a horas del comienzo de un toque de queda nocturno de tres semanas.
Esta cifra es; sin embargo, el resultado de un aumento significativo en la cantidad de pruebas, por lo que el porcentaje de positivos se mantuvo por debajo del 3%, aunque aumentó levemente respecto a la semana pasada.
Los nuevos casos detectados elevaron el número de pacientes activos a 13 mil 949, 315 de ellos en estado grave y 102 en situación crítica.
El toque de queda, aprobado este lunes por el Gabinete de Coronavirus y que debe aún ser ratificado este martes por el Ejecutivo, entraría en vigor el miércoles por la tarde, horas antes del comienzo de la festividad judía de Janucá, y según medios locales podría extenderse hasta el próximo 2 de enero.
Durante este período, en horas de la noche que aún deben ser especificadas, quedará prohibida la actividad comercial y se limitará el movimiento entre áreas.
La medida fue comunicada anoche por la Oficina del Primer Ministro como parte de una serie de nuevas restricciones para frenar la propagación del virus.
Estas incluyen, además, pruebas obligatorias para quienes regresen del extranjero y deban entrar en cuarentena y un límite a la cantidad de personas en el transporte público.
La decisión de aplicar un toque de queda nocturno representa un paso hacia atrás en la lenta desescalada que comenzó Israel tras su segundo confinamiento, entre mediados de septiembre y mediados de octubre.
El incremento en el porcentaje de pruebas positivas y la propagación de Covid-19 en múltiples ciudades y sectores de la sociedad israelí llevaron a las autoridades a alertar, en los últimos días, que el país se acercaba a una tercera ola de la pandemia.
Desde el Ministerio de Sanidad ya se habla incluso de un tercer confinamiento, que según medios dependerá de la efectividad del toque de queda nocturno, cuestionado por muchos expertos, que argumentan que lo que hace falta es aplicar con mayor severidad las restricciones vigentes en lugar de agregar nuevas medidas.
Israel, con unos nueve millones de habitantes, ha registrado casi 350 mil casos de coronavirus desde el comienzo de la pandemia, que ha causado además cerca de 3 mil muertes.