Un juez de la Corte de Distrito en Brooklyn, Nueva York, Estados Unidos, fijó este miércoles un plazo de 90 días a los fiscales para definir y confirmar si solicitarán la pena de muerte contra Rafael Caro Quintero, fundador del Cártel de Guadalajara, acusados de diversos cargos por narcotráfico.
Durante una audiencia de apenas 30 minutos, y acompañado por su sobrino Ismael Quintero Arellano, también preso en la Unión Americana, la Corte determinó asignarle al narcotraficante mexicano una nueva abogada experta en casos complejos, ante la posibilidad de que su vida esté en juego.
Caro Quintero acudió a la audiencia con el informe beige y camisa amarilla de la prisión de Nueva York, donde se encuentra recluido. Se le vio demacrado, pero atento a las palabras del juez y lo que acontecía en la sala.
De esta forma, el destino y situación jurídica de Rafael Caro Quintero, en suelo estadounidense, se definirá el 25 de junio próximo, a las 11:00 horas tiempo local, que será cuando se lleve a cabo la nueva audiencia.
Esta fue segunda audiencia penal en Estados Unidos del fundador del Cártel de Guadalajara, entregado en custodia el pasado 27 de febrero, junto con otros 28 capos mexicanos, a la justicia estadounidense.
Caro Quintero, también integrante del Cártel de Sinaloa, está acusado en Estados Unidos de crimen organizado, tráfico de drogas y posesión de armas de uso exclusivo para las fuerzas armadas.
Además de participar en el secuestro, tortura y asesinato, del exagente de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos, la DEA, Enrique “Kiki” Camarena, en 1985, aunque este caso está radicado en otro tribunal estadounidense.