
Una jueza de Estados Unidos extendió indefinidamente este jueves la orden que bloquea el decreto del gobierno para prohibir que la Universidad de Harvard acepte estudiantes extranjeros.
La orden judicial impide al Departamento de Seguridad Nacional y al Departamento de Estado hacer cambios en el programa de visas estudiantiles de esa universidad.
Con esta decisión de la jueza, el gobierno de Trump debe permitir inmediatamente la matriculación en Harvard de estudiantes de otros países.
La jueza Allison Burroughs solicitó a los abogados de Harvard y del Departamento de Justicia que lleguen a un acuerdo definitivo para la aceptación de estudiantes extranjeros.
“Queremos asegurarnos de que no haya más triquiñuelas. Nuestros estudiantes están aterrorizados y ya estamos teniendo gente transfiriéndose” a otras universidades, indicó el abogado de Harvard Ian Gershengorn.
En una presentación de último momento antes de la audiencia, la administración Trump emitió un aviso formal de su intención de impedir a Harvard que matricule y acoja a estudiantes extranjeros, iniciando así el proceso legal de inhabilitación en reemplazo de la orden emitida con anterioridad.
Esto le dio a Harvard 30 días para entregar pruebas que muestren por qué no debería impedírsele albergar e inscribir a estudiantes extranjeros, que en este curso representaron 27 por ciento del alumnado.