Un juez peruano aceptó el pedido de la Fiscalía y puso fin a la detención domiciliaria que cumplía el expresidente peruano Pedro Pablo Kuczynski (2016-2018) desde hacía 36 meses, en el marco de las investigaciones por el escándalo de corrupción de la constructora brasileña Odebrecht.
Según informó este domingo el Poder Judicial, el magistrado Jorge Chávez ordenó cambiar la detención domiciliaria de Kuczynski por la comparecencia con restricciones, como no poder abandonar Lima sin permiso judicial.
El exmandatario está procesado en este caso por un presunto delito de lavado de activos cuando se desempeñaba como presidente del Consejo de Ministros y ministro de Economía, entre 2002 y 2006, durante el Gobierno de Alejandro Toledo.
La Fiscalía lo investiga por el presunto delito de lavado de activos, pero hasta la fecha no ha podido enjuiciarlo.
El octogenario expresidente sufre de una arritmia cardíaca severa y lleva un marcapasos.
El 21 de marzo de 2018 se convirtió en el primer presidente en ejercicio en América en renunciar por el escándalo de Odebrecht.
Kuczynski dejó el cargo luego de que la constructora brasileña revelara que contrató a dos consultoras vinculadas a él -Westfield Capital y Firts Capital- para que la asesoren en operaciones financieras en Perú, un dato que omitió divulgar cuando llegó al poder.