Miles de libaneses desplazados por los enfrentamientos entre Hezbolá e Israel emprendieron este miércoles el regreso a sus casas, gracias a un alto el fuego instaurado tras dos meses de guerra abierta.
La tregua, en vigor desde la madrugada, interrumpe un conflicto que ha dejado miles de personas muertas y 900 mil desplazados en el Líbano, además de decenas de miles de evacuados en el norte de Israel.
Miles de libaneses regresan a sus hogares tras el alto el fuego entre #Israel y #Hezbolá
— DW Español (@dw_espanol) November 27, 2024
El conflicto ha desplazado a más de 1,2 millones de personas. Más de la mitad cruzaron la frontera hacia Siria. /es pic.twitter.com/X119203MSd
Antes de ello, el ejército libanés anunció que había “comenzado a fortalecer su presencia” en el sur, bastión de Hezbolá, cercano al río Litani.
Por su parte, el diputado libanés, de Hezbolá, Hassan Fadlallah, dijo que su movimiento cooperará con el Estado para reforzar el despliegue del ejército en el sur, asegurando no tener “armas visibles ni bases en el sector”.
Por su parte, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) aseguró que está adaptando sus operaciones a la “nueva situación”.
Sin esperar a que los militares dieran luz verde, miles habitantes del sur de Líbano, de la periferia sur de Beirut y del valle de Becá, emprendieron el camino de vuelta a casa.
Pocas horas después de la entrada en vigor de la tregua, el ejército israelí anunció que restringiría los movimientos de población en el sur del Líbano durante la noche.
En tanto, el ejército libanés había ordenado a la población “esperar” a que las tropas israelíes se retiraran “antes de regresar a las aldeas y pueblos en la línea del frente”.
No obstante, la carretera que conduce al sur del país quedó atascada por vehículos y camionetas sobrecargadas, cuyos conductores cantaban y hacían sonar los cláxones.
¿Un nuevo comienzo?
Las hostilidades comenzaron el día después del ataque de Hamás que desencadenó la guerra en Gaza el 7 de octubre de 2023, cuando Hezbolá abrió un frente contra Israel en apoyo de su aliado palestino.
Después de casi un año de disparos transfronterizos, Israel lanzó el 23 de septiembre una campaña de bombardeos masivos contra Hezbolá y desplegó, una semana después, tropas terrestres en el sur de Líbano.
Según las autoridades libanesas, al menos 3 mil 823 personas murieron en el país por este conflicto, la mayoría de ellas, desde septiembre. Del lado israelí, 82 militares y 47 civiles fallecieron en 13 meses, según las autoridades del país.
Ahora, la tregua pactada prevé una retirada progresiva durante 60 días de los combatientes de Hezbolá y las tropas israelíes del sur de Líbano, en la frontera con Israel, para permitir el despliegue del ejército libanés.