El primer ministro de Líbano, Nayib Mikati, acusó este viernes a Israel de rechazar cualquier alto al fuego con Hezbolá, después de que el ejército israelí bombardeara bastiones del movimiento libanés en la periferia sur de Beirut.
La agencia nacional de noticias libanesa (ANI) reportó al menos diez bombardeos al sur de la capital, después de que Israel emitiera avisos de evacuación.
Los ataques destruyeron “decenas de edificios” tan solo unas horas después de la visita de dos funcionarios estadounidenses a Israel, Amos Hochstein y Brett McGurk, quienes llegaron el jueves para buscar una salida a la guerra en Líbano y avanzar hacia un alto al fuego en la Franja de Gaza.
La situación en el norte de Gaza, confrontado a una ofensiva israelí contra Hamás, es “apocalíptica” y toda la población se encuentra en “riesgo inminente de muerte“, alertaron los jefes de 15 agencias de ayuda humanitaria de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Mikati denunció los ataques israelíes y el estancamiento de las negociaciones de tregua.
“La prolongación, una vez más, de la agresión del enemigo israelí contra las regiones libanesas, y el hecho de que haya vuelto a atacar los suburbios del sur de Beirut con operaciones destructivas, constituyen indicadores que confirman su rechazo a todos los esfuerzos para lograr un alto el fuego”, subrayó Mikati en un comunicado.
El ejército israelí confirmó que bombardeó objetivos de Hezbolá en Beirut y en Nabatieh, en el sur del país.
Hezbolá abrió un frente con Israel el 8 de octubre de 2023, en apoyo a Hamás, que gobierna Gaza. Y al menos mil 829 personas han muerto en Líbano.