Tres de los siete religiosos católicos secuestrados en Haití once días atrás fueron liberados, informó este jueves el portavoz de la conferencia episcopal de este país caribeño, Loudger Mazile.
En el grupo de diez personas secuestrados cerca de Puerto Príncipe había cuatro sacerdotes y una monja haitianos, así como dos franceses: una monja y un sacerdote que lleva más de 30 años viviendo en Haití.
- Los secuestradores exigieron un rescate de un millón de dólares. La policía sospecha que una banda armada activa en la zona, conocida como “400 mawozo”, está detrás del secuestro.
El suceso, que conmocionó a la opinión pública más allá de las fronteras de la isla, provocó una profunda crisis política en el país, que en los últimos meses ha visto un repunte de los secuestros para pedir rescates en Puerto Príncipe y en las provincias.
La Iglesia católica convocó una huelga pocos días después del secuestro para denunciar la inacción de las autoridades y “la dictadura del secuestro” en el país, según el presidente de la Conferencia Episcopal de Haití, Monseñor Launey Saturné.
El 15 de abril se celebraron misas y se tocaron las campanas de las iglesias de todo el país al mediodía en señal de protesta y para exigir la liberación de los rehenes.
Desde hace tiempo, asistimos al descenso a los infiernos de la sociedad haitiana”, declaró el arzobispo de Puerto Príncipe, Max Leroy Mesidor, tras la tragedia.