Algún día, cuando se escriba la historia de esta sangrienta invasión de Rusia a Ucrania, el puerto de Mariúpol se tendrá que poner en la misma trágica lista de ciudades mártires que fueron prácticamente reducidas a escombros por la barbarie.
Una lista que incluye ciudades como Alepo en Siria. Sarajevo en Yugoslavia. Beirut en Líbano. Grozny, en Chechenia, o la misma Stalingrado de Rusia.
Y es que, con los hechos ocurridos en esa ciudad, hoy Mariúpol es donde más horrores de guerra se han registrado en Ucrania.
Sus habitantes han pagado caro interponerse al avance de las tropas enemigas que buscan crear un puente terrestre con la región del Dombás.
“La única palabra para describir lo que ha sucedido es genocidio a nuestra nación”, dijo Vadim Boychenko, alcalde de Mariúpol, Ucrania
Misiles, cohetes y armamento pesado han destruido más de 90% de la ciudad.
“Todo está destruido, puedes verlo tú mismo, no queda ningún apartamento intacto. Todo está roto, no sabemos cómo vivir”, señaló Natalya, habitante de Mariúpol, Ucrania.
Si Rusia se apoderara de Mariúpol, controlará ya más del 80% de la costa ucraniana en el Mar Negro, es decir, cortaría su comercio marítimo y la aislará casi por completo.
Unas 200 mil personas apenas sobreviven y la Cruz Roja tiene prohibido llevarles ayuda humanitaria. ¿Dónde consiguen agua? ¿Qué comen?
“Estamos cocinando con fuego, por ahora tenemos algo de comida y algo de leña. En una semana no tendremos nada, nada de comida”, Irina Chernenko, habitante de Mariúpol, Ucrania.
Los incontables ataques sacaron a miles de lo profundo, porque también de hambre o frío se pierde la vida.
Los corredores humanitarios y el transporte para huir fueron destruidos.
“Muchos autos fueron bombardeados y quemados, por lo que la gente no podía irse. Había mucha gente muriendo en las calles, los cadáveres yacían en las calles”, Sergiy, jefe de Comunidad en Mariúpol, Ucrania.
Una “ciudad mártir” que entierra a sus muertos donde sea, si es que los ataques lo permiten.
“Los militares nos dijeron que pusiéramos los cuerpos en algún lugar frío. El único lugar frío ahora son los sótanos. Pero hay personas en los sótanos; así que los enterramos aquí”, Andrei, habitante de Mariúpol, Ucrania
La táctica utilizada por Vladimir Putin es similar a la que se usó en la ciudad Siria de Aleppo y en Grozny, Chechenia, que fueron destruidas totalmente y la población casi desapareció.
¿Hay futuro para la ciudad?
“Distritos enteros fueron destruidos. No hay comunicación allí, no hay edificios. Nadie lo restaurará, es una zona muerta durante los próximos 40 o 50 años, quizá para siempre”, Oleksandr Bezimov, habitante de Mariúpul, Ucrania.
Casi nada queda en pie en Mariúpol ¿Cuántos ataques más resistirá la ciudad mártir?