Durante 2021, la migración hacia los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) creció 22% con respecto al año anterior, después de la caída histórica ocasionada por la pandemia de COVID-19.
En su informe anual sobre migraciones divulgado, la OCDE recuerda que a pesar de los 4.8 millones de nuevas entradas permanentes, la cifra sigue medio millón por debajo de la de 2019.
“El aumento de los flujos migratorios permanentes continuará en 2022 a medida que los países de la OCDE eliminan las medidas restrictivas”, indica el documento.
El informe recuerda que en la cifra de 4.8 millones se incluyen también los cambios de estatus de migrantes o residentes temporales que pasan a tener residencia permanente.
Sobre esta premisa, España recibió a 338 mil 300 migrantes en 2021, según los cálculos de la organización, lo que supone 51.4% más que en el año anterior.
La migración de familiares de migrantes ya asentados en los países de destino supuso la principal fuente de entradas en el conjunto de países de la OCDE con 1.5 millones de personas y un incremento anual de 39%.
Los trabajadores migrantes tuvieron el mayor incremento porcentual –45%– y alcanzaron la cifra de 750 mil, el mayor número en una década, debido sobre todo a los aumentos registrados en Estados Unidos, Canadá, Reino Unido e Italia.
También aumentaron los trabajadores de temporada, cuyas entradas se incrementaron 18% en 2021 hasta situarse en 543 mil, con la Unión Americana, Reino Unido y Francia.
Además, los solicitantes de asilo se dispararon 28% en 2021 y superaron la cifra de un millón de personas con Nicaragua, Afganistán y Siria como los principales países de origen.
La migración permanente con fines humanitarios subió ligeramente, 3%, tras cuatro años consecutivos de declive y se situó en torno a 400 mil nuevas llegadas.