Miles de manifestantes marcharon hacia el Capitolio de Estados Unidos en Washington este miércoles en rechazo al primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, y para pedir un alto al fuego tras nueve meses de guerra en Gaza, mientras el dirigente israelí se dirige al Congreso estadounidense.
Una multitud con banderas palestinas y pancartas se congregó cerca del Capitolio, donde se registraron choques con la policía, que disparó gas pimienta para dispersar la protesta que pedía la detención de Netanyahu, sobre el que pesa una orden de arresto de la Corte Penal Internacional.
“Estamos horrorizados por la destrucción del sistema de salud en Gaza”, contó el doctor Karameh Kuemmerle, manifestante.
Durante su discurso ante el Congreso estadounidense, el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, elogió al expresidente y candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, por su apoyo a Israel.
“Agradezco al presidente Trump por todo lo que ha hecho por Israel, desde reconocer la soberanía de Israel sobre los Altos del Golán hasta hacer frente a la agresión de Irán, pasando por reconocer Jerusalén como nuestra capital y trasladar allí la embajada estadounidense”, dijo Netanyahu. También agradeció al presidente Joe Biden “sus incansables esfuerzos en favor de los rehenes”, refiriéndose a las personas secuestradas por Hamás.
Las relaciones entre Estados Unidos y su aliado Israel se han tensado mientras las muertes de civiles aumentan en la Franja de Gaza, lo que ha llevado a protestas y críticas a la administración de Joe Biden.
El 7 de octubre, comandos islamistas de Hamás mataron a mil 197 personas, en su mayoría civiles, y secuestraron a 251 en el sur de Israel, según un recuento basado en datos oficiales israelíes.
En respuesta, Israel lanzó una ofensiva que ya mató a más de 39 mil personas en Gaza, también civiles en su mayor parte, según el Ministerio de Salud del territorio palestino.