El ministro de Relaciones Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, lamentó el gesto de Hungría de resistir la adopción de un embargo al petróleo de Rusia.
La Unión Europea (UE), dijo Kuleba, tendrá que hallar una forma de atender a las preocupaciones de ese país, sin referirse explícitamente a Hungría.
En la visión del jefe de la diplomacia ucraniana, el sexto paquete de sanciones tiene que incluir un embargo petrolero, y lamento que esta decisión tome tanto tiempo.
Los ministros de Relaciones Exteriores de la UE mantuvieron una larga reunión en la capital belga para tratar de vencer la resistencia de Hungría a aceptar el embargo al petróleo ruso, aunque el esfuerzo no prosperó.
“No hemos logrado alcanzar un acuerdo político. Con ello, la discusión sobre la inclusión de un embargo petrolero en un nuevo paquete de sanciones ahora retornará a la mesa de negociaciones a nivel de los representantes permanentes del bloque en Bruselas”, dijo el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, en una conferencia de prensa.
Al llegar a la reunión, la ministra de Relaciones Exteriores de Alemania, Annalena Baerbock, había admitido que todavía hay algunas cosas que deben aclararse en las etapas finales.
En tanto, Joao Gomes Cravinhos, jefe de la diplomacia de Portugal, indicó que podrían ser necesarias unas “dos semanas” para limar diferencias y alcanzar un acuerdo.
El nudo de la controversia es la resistencia explícita de Hungría de apoyar una interrupción de las importaciones de petróleo de Rusia, alegando que ello representa un riesgo para su seguridad energética.
El canciller húngaro, Peter Szijjarto, dijo el lunes que el costo de adaptar la infraestructura de Hungría para poder prescindir del petróleo ruso ascendería a entre 15 mil y 18 mil millones de euros, entre 16 mil y 19 mil millones de dólares. Sin embargo, Borrell apuntó que en la reunión escuchó “cifras diferentes”, sin abundar en detalles.
Como parte de su propuesta, la UE ofreció a Hungría, la República Checa y Eslovaquia un período adicional de un año para adaptarse y eliminar gradualmente las importaciones de petróleo ruso, pero Hungría ya dejó claro que considera el plazo insuficiente.