Ucrania ha comenzado una ofensiva en el sur del país, que Rusia asegura haber rechazado, mientras una misión de expertos del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) intenta abrirse camino desde Kiev hacia la central nuclear de Zaporiyia para labores de inspección en medio de combates en la zona.
Aunque tanto Moscú como Kiev han declarado su interés en que la misión del OIEA cumpla su cometido y pueda inspeccionar el estado de la mayor planta nuclear en el continente europeo, su proximidad a la zona de los combates dificulta el cumplimiento de esa tarea.
Prorrusos denuncian ataque contra la central de Zaporiyia
La administración prorrusa de Energodar, ciudad en el sur de Ucrania controlada por el Ejército ruso que alberga la mayor central de Europa, denunció este martes un nuevo ataque ucraniano contra la planta.
Las Fuerzas Armadas de Ucrania atacaron el territorio de la central nuclear de Zaporiyia y la línea ribereña de la ciudad, declaró la oficina de prensa de la administración urbana.
Según el comunicado, las fuerzas ucranianas emplearon artillería de gran calibre y se registraron dos impactos junto al edificio del depósito de combustible gastado.
La administración prorrusa aseguró que con estas acciones la parte ucraniana busca impedir la visita a la planta de la misión del OIEA, encabezada por el director general del organismo, el argentino Rafael Grossi.
Ucrania acusa a Rusia de tratar de impedir misión del OIEA
A su vez, Kiev acusó al Ejército ruso de bombardear las posibles rutas por las que la misión podría llegar a la central.
“Todo era predecible. Rusia ataca de manera premeditada los corredores por los que la misión del OIEA debe acceder a la central nuclear de Zaporiyia”, escribió hoy en Twitter el asesor de la Presidencia ucraniana Mykhailo Podolyak.
Podolyak explicó que los militares rusos llevan a cabo estas acciones para proponer un paso a través de la anexionada península de Crimea y determinadas zonas de las regiones de Donetsk y Lugansk, ocupadas por Rusia, algo a lo que se opone terminantemente el Gobierno ucraniano.
El asesor insistió en que los expertos del OIEA deben llegar a la planta por el territorio controlado por Ucrania y que se mantienen inamovibles las exigencias de que las tropas rusas abandonen la central nuclear y de que en sus instalaciones haya solo personal ucraniano.
El Kremlin reafirma su interés en la inspección
“Confiamos en que la misión (del OIEA) se llevará a cabo, como se ha acordado. Vuelvo a repetirlo: estamos interesados en esta misión y la esperamos desde hace mucho”, declaró hoy el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
Peskov añadió que Rusia insiste en llamar la atención de toda la comunidad mundial sobre la conducta irresponsable de los militares ucranianos, que con sus ataques contra la central de Zaporiyia ponen en peligro la instalación, los territorios aledaños y una geografía mucho más amplia.
“Estamos convencidos de que países europeos (…) que tienen una gran influencia en Kiev deben utilizarla para prohibirle que continúen esas acciones muy pero que muy peligrosas”, subrayó Peskov.
Al mismo tiempo, insistió en que la operación militar especial (en Ucrania) continúa de manera metódica, de conformidad con los planes, y todos sus objetivos serán cumplidos.
Recrudecen combates al sur de Ucrania
La llegada de la misión del OIEA a Kiev -confirmada por el Ministerio de Energía a la agencia Interfax-Ucrania- ha coincidido con el recrudecimiento de las acciones militares en sur del país.
Allí, las fuerzas de Ucrania lanzaron el lunes 29 de agosto una ofensiva en la que, según el mando militar ucraniano, rompieron una de las tres líneas defensivas rusas en varios sectores del frente.
Las autoridades ucranianas advirtieron de que no ofrecerán información de las operaciones para no entorpecer su marcha.
“No oiréis nada concreto de nadie con responsabilidades, porque es una guerra. Pero los ocupantes deben saber que los echaremos fuera de la frontera, de nuestra frontera, cuya línea no se ha modificado. Y los ocupantes lo saben muy bien”, dijo el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, en su tradicional alocución nocturna.
Pese al hermetismo sobre el objetivo de la ofensiva ucraniana, todos los indicios señalan que se trata de la recuperación de Jersón, la única capital regional conquistada por las tropas rusas desde que entraron en Ucrania el 24 de febrero de ese año.
Jersón, situada en la margen derecha del río Dniéper, está unida por tres puentes, ahora intransitables, al resto de la región homónima, que colinda con la península de Crimea, desde donde las tropas rusas reciben sus suministros, situación que torna en extremo vulnerable su situación, según expertos militares ucranianos.
Rusia asegura que ha rechazado ofensiva ucraniana
El Ministro de Defensa de Rusia admitió hoy que las fuerzas ucranianas lanzaron una potente ofensiva en el sur, que situó en dirección de Mykolaiv y Krivói Rog, en la región de Dnipropetrovsk, y que fue rechazada por las tropas rusas.
“Como resultado de unas acciones eficaces de las fuerzas rusas fueron eliminados 48 tanques, 46 vehículos de infantería, 37 blindados de otras clases, ocho camionetas con ametralladoras pesadas y más de 1.200 militares”, dijo el portavoz castrense ruso, Ígor Konashénkov.
Al mismo tiempo, el militar ruso indicó que durante la jornada pasada la defensa antiaérea interceptó 44 misiles HIMARS en las proximidades de las ciudades de Jersón y Nueva Kajovka, que hoy también fueron atacadas.