La situación humanitaria en la Franja de Gaza es alarmante, con un aumento en la cifra de niños muertos por falta de alimentos, lo que indica que la zona se acerca a una hambruna.
Según informes de la ONU, al menos 10 niños murieron por inanición y deshidratación en el norte del territorio en la última semana, lo que se suma a las 30 mil muertes en toda Gaza.
“Una marca muy triste, al igual que las 30 mil muertes en toda Gaza. Y como esa cifra, estos son registros oficiales y, como todos han apuntado bien, los números no oficiales desafortunadamente se puede esperar que sean más altos”, declaró Christian Lindmeier, vocero de la OMS.
Ante esta crisis, Estados Unidos anunció que se unirá a otros países para enviar ayuda humanitaria por aire hacia el enclave palestino.
Washington también planea abrir un corredor marítimo para llevar grandes cantidades de suministros.
“Necesitamos hacer más, y Estados Unidos hará más. En los próximos días, nos uniremos a nuestros amigos en Jordania y otros para proporcionar envíos aéreos de alimentos y suministros adicionales”, dijo Joe Biden, presidente de Estados Unidos.
Este anuncio se produce después de que 112 civiles murieron cuando intentaban obtener comida de un convoy de ayuda.
Testigos en el lugar afirman que soldados israelíes dispararon contra cientos de personas hambrientas que se congregaron alrededor de los camiones escoltados por vehículos militares.
Por otro lado, la Comisión Europea anunció que desbloqueará 50 millones de euros para la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos.
Sin embargo, esta ayuda está sujeta a condiciones, como una auditoría externa que demuestre que los colaboradores de la agencia no participaron en los ataques de Hamás del 7 de octubre, según las acusaciones de Israel.